El comandante de la sección aeroespacial de los Guardianes de la Revolución iraní, general de brigada Amirali Hajizadeh, declaró el sábado que asumía la "total responsabilidad" de la tragedia del Boeing 737 ucraniano, derribado el miércoles cerca de Teherán por el ejército iraní.
"Asumo la total responsabilidad", dijo Hajizadeh, en una declaración difundida por la televisión. "Hubiera preferido morir antes que ser testigo de un accidente semejante", aseguró. Los 176 pasajeros y tripulantes del avión fallecieron en el accidente.
Según el militar, un soldado disparó sin poder obtener la confirmación de una orden de tiro debido a una "interferencia" en las comunicaciones.
El soldado confundió el avión con un "misil de crucero" y tuvo "10 segundos" para decidir, declaró el comandante, que aseguró que el misil explotó al lado del avión.
"Era un misil de corto alcance que explotó al lado del avión. Es la razón por la que el avión continuó" volando durante un momento, dijo el militar, antes de precisar que el Boeing 737 de la compañía Ukraine International Airlines "explotó cuando tocó el suelo".
El canciller iraní Javad Zarif reconoció el "error humano", y catalogó a la jornada como "un día triste". Sin embargo, Zarif procuró señalar a EE.UU. expresando que la situación se generó "en tiempos de crisis causado por el aventurerismo de los Estados Unidos". Por su parte, el presidente Hasán Rohaní admitó que se trata de una "gran tragedia y un error imperdonable".
En tanto, el presidente ucraniano Volodímir Zelenski, exigió a Irán que conduzca a los responsables de esta situación ante la justicia, al tiempo que reclamó al régimen islámico que "entregue los cuerpos, asuma una indemnización y emita una disculpa oficial".
First published: 09:52, 11.01.20