Un estudio realizado en Australia reveló que el antisemitismo se generalizó en el último tiempo en las universidades locales. Dos de cada tres estudiantes judíos de ese país experimentaron antisemitismo durante sus estudios, y más de la mitad de los estudiantes (57%) ocultaron su identidad judía en las instituciones de enseñanza superior para evitar experimentar el antisemitismo.
Estas preocupantes estadísticas se desprenden de un exhaustivo estudio nacional realizado en universidades de toda Australia para hacer un seguimiento del fenómeno.
Se trata del primer estudio de este tipo realizado en Australia, llevado a cabo en 33 instituciones de enseñanza superior (las cinco mejores universidades recibieron un peso adicional en el estudio), con el que se pretende descubrir las experiencias y sentimientos de los estudiantes judíos y ofrecer una imagen del "antisemitismo cotidiano" que no se denuncia.
El estudio fue encargado por la Federación Sionista de Australia, con el apoyo de la Unión Australiana de Estudiantes Judíos y la Organización Sionista Mundial.
Como se mencionó, el 64% de los participantes informaron de al menos un incidente antisemita al que estuvieron expuestos durante su estancia en una universidad local.
Una expresión de la sensación de impotencia de los estudiantes judíos es el hecho de que la inmensa mayoría -el 85%- no denunció los incidentes porque creía que las instituciones no abordarían seriamente la cuestión.
Además, las experiencias antisemitas también tienen implicaciones a largo plazo: no menos del 20% de los estudiantes judíos indicaron que se abstuvieron de llegar al campus para evitar la posibilidad de encontrarse con el antisemitismo.
Jeremy Leibler, presidente de la Federación Sionista de Australia, declaró: "Es inconcebible que una fracción tan grande de los estudiantes universitarios judíos haya sentido la necesidad de ocultar su identidad. Estas conclusiones también son importantes para el gobierno israelí. Podemos y debemos hacer mucho más para financiar programas educativos en respuesta a esta inquietante situación".
Racheli Baratz-Rix, responsable del Departamento de Lucha contra el Antisemitismo y Mejora de la Resiliencia de la Organización Sionista Mundial, subrayó que "estas cifras sirven como indicador de advertencia. La escalada del antisemitismo en Australia es un presagio que exige una acción inmediata y global para evitar repercusiones más graves".
Por último, Alisa Foster, presidenta de la Unión Australiana de Estudiantes Judíos, sostuvo: "Nuestras universidades fallaron clamorosamente a los estudiantes judíos, haciendo que muchos sientan la necesidad de ocultar su identidad. Espero que estos sorprendentes datos inciten a los responsables de la toma de decisiones a actuar, garantizando que los estudiantes judíos reciban el reconocimiento, la voz y la representación que merecen".
El estudio se realizó entre marzo y abril de 2023 e incluyó una base de datos de estudiantes de los últimos 5 años.
