El brutal ataque de Hamás contra Israel el 7 de octubre, que llevó a las FDI a una respuesta sin precedentes en la Franja de Gaza y provocó una feroz ola de llamados antiisraelíes y antisemitas en el mundo hizo que muchos israelíes se acercaran a la tradición judía y al judaísmo, incluso entre la gran población "irreligiosa" de Israel, que cuenta con unas 560 mil persona.
La organización Atim, que lidera el proyecto "Conversión según la Halajá", un procedimiento personalizado y liberado de las ataduras del rabinato, publica por primera vez datos sobre el número de solicitudes sobre el tema.
En enero de 2024, la organización recibió 230 solicitudes frente a 208 en enero de 2023 (un aumento del 10,5%); En febrero se recibieron 240 solicitudes frente a 180 en el mes correspondiente del año pasado (un aumento del 33%), mientras que en marzo de este año se registraron 370 solicitudes frente a 230 en el mismo mes del año pasado (+61%).
El rabino Dr. Shaul Farber, presidente de Atim, aseguró: "Reconocemos una tendencia de deseo de ser parte de la comunidad judía israelí por parte de poblaciones que no son reconocidas como judías, y esta tendencia también se expresa en muchas solicitudes".
"Estamos trabajando con todo vigor para ayudar y satisfacer la demanda. Más allá del aspecto logístico y religioso, vemos esto como una misión de fortalecer al pueblo judío y al Estado de Israel en tiempos de guerra", agregó.
El sistema de conversión de la Oficina del Primer Ministro aún no entregó datos sobre la demanda desde el estallido de la guerra, pero confirmó la existencia de la tendencia y respondió: "El sistema de conversión estatal ha sido testigo de un aumento de quienes solicitan la conversión durante el último trimestre de 2023, sin embargo, es prematuro determinar que este aumento se debe necesariamente al 7 de octubre".
"Continuaremos monitoreando los datos durante el año 2024", remarcaron.