La ceremonia de entierro de Amir Khouri, el agente de policía que murió al intentar luchar contra el terrorista que provocó un atentado en Bnei Brak el martes, comenzó este jueves en la Iglesia de la Anunciación de Nazaret.
La ceremonia de entierro fue seguida de una marcha fúnebre hasta el cementerio militar de Nof Hagalil, donde fue enterrado.
Miles de personas asistieron a la ceremonia y compartieron un momento con la familia del agente asesinado.
"Era un verdadero héroe, un luchador, no temía a nada", dijo la novia de Houri, Shani Yesher. "Amaba a la policía y siempre respondía. Me dijo que un día detendría un ataque terrorista. Yo le dije que no valía la pena", recordó.
"Pido que todo el mundo diga que fue un héroe, aunque no le gustaría que su foto estuviera en todas partes. Durante siete años no publicó una foto nuestra y ahora hay en todas partes. Se volvería loco si viera esto", agregó.
Shani también contó que tenía miedo de que algo así sucediera.
"Él ya había pasado por un accidente muy duro y lo había superado. No quería estar de baja ni un minuto. Siempre quiso estar haciendo y estar en primera línea, no le importaba recibir un golpe, para que los demás no salgan heridos. Estoy seguro de que le duele que también hayan muerto otras personas. Si le preguntaras ahora, habría querido que sólo muriera él", sumó.
Cuando su padre, Jeris, escuchó las emisiones en directo que informaban del atentado en Bnei Brak, intentó llamar a su hijo y luego le envió un mensaje de texto pidiéndole que avisara su estado.
"Empecé a llamar, tal vez veinte veces. No hubo respuesta. No se despidió", aseveró entre lágrimas.
Cuando Khouri fue declarado muerto alrededor de las 10 de la noche, Jeris todavía no había sido informado.
"Al cabo de 10 minutos vinieron policías de la comisaría, tocaron el timbre y comprendí que se había terminado", recordó. "Yo mismo soy un policía retirado. Serví durante 32 años y sé lo que es la policía y el ejército. Se nos vino encima una tragedia, como un trueno en un día soleado", concluyó.
El martes, poco antes de las 8 de la tarde, llegaron a la policía informes sobre un hombre armado en Bnei Brak. El equipo de Khouri se apresuró a acudir al lugar y, en menos de dos minutos, él y su compañero se encontraron cara a cara con el terrorista. Tras intercambiarse disparos y el joven policía resultó herido pero su compañero consiguió matar al atacante.
Las imágenes de las cámaras corporales difundidas por la policía un día después del ataque incluían al compañero informando el incidente.
Además de Khouri, otras cuatro vidas inocentes se cobraron en el ataque: Yaakov Shalom (37) y Avishai Yehezkel (30), de Bnei Brak, y dos trabajadores ucranianos residentes en Israel: Victor Sorokopot (32) y Dimitri Mitrik (24).
