Este miércoles fue presentado a Benjamín Netanyahu un ambicioso plan para alcanzar una población de hasta un millón de colonos judíos en Cisjordania, que incluye la creación de nuevas ciudades, zonas industriales, un hospital y un aeropuerto. El plan fue ideado por el jefe del Consejo Regional de Samaria, Yossi Dagan, que actualmente atiende a 170.000 residentes judíos.
Un grupo de ingenieros, arquitectos y otros profesionales trabajaron en el plan durante el último año, después de que sus principios fundacionales se debatieran con cientos de dirigentes de asentamientos.
El proyecto incluye una fuerte ampliación de asentamientos existentes que se convertirán en ciudades, así como la creación de otras nuevas. Además, pide construir líneas de tren que conectarán Cisjordania con el centro y el norte de Israel y se construiría un aeropuerto.
Según los autores del proyecto, se buscaría construir un nuevo hospital para atender a la creciente población de colonos, así como nuevas zonas industriales para proporcionar empleo.
Entre los asentamientos cuya expansión está prevista se encuentran Itamar, a las afueras de la ciudad palestina de Naplusa, Avnei Hefetz, cerca de Tulkarm, Tzufim y Sal'it, cerca de Qalqilyah. Además buscan reasentar asentamientos evacuados en el plan de retirada de 2005 en el norte de Cisjordania, incluido Homesh, donde los israelíes ya establecieron una Yeshiva aprobada por el gobierno actual.
Una ciudad prevista en el norte de Cisjordania, que se llamaría Ta'anakh, podría absorber a 30.000 residentes. La ciudad de Shamir se establecerá en la misma zona general, pero más alejada de la frontera con Israel, donde podrá absorber a 100.000 residentes.
Los autores afirman que su plan ayudaría a resolver la escasez de viviendas en Israel. "De cara al futuro hay que resolver el hacinamiento en el centro del país. Nuestro plan se basa en el supuesto de que Samaria es la clave para tal resolución, con millones de acres de tierra estatal actualmente deshabitada, a una distancia de 20 kilómetros de Tel Aviv", explicaron.
El plan se propone al primer ministro en medio de las tensiones con Estados Unidos por la construcción en los asentamientos de Cisjordania y el traspaso de autoridad sobre partes de la región, del ministro de Defensa, Yoav Gallant, a Bezalel Smotrich, ministro de Defensa y de Hacienda y defensor de los asentamientos.
Es importante recordar que Washington criticó el voto de la Knesset para revocar la ley de retirada de 2005, despejando el camino para el reasentamiento de Homesh mientras el gobierno trabaja para legalizar docenas de puestos de avanzada, incluido el disputado Eviatar, que los palestinos afirman que fue construido en tierras de propiedad privada.