En septiembre, 4,036 personas murieron en Israel, se trata de un aumento del 18.6% en comparación con el número de decesos del mismo mes en 2019, aunque el incremento natural fue del 2%. Los datos del Ministerio de Salud muestran que 642 pacientes con coronavirus fallecieron en el país a causa de la enfermedad, es decir, que el 15.9% de los decesos se produjo por complicaciones relacionadas con el COVID-19. Esto significa que la pandemia acabó con la vida de una de cada seis personas.
La Oficina Central de Estadísticas (CBS, por sus siglas en inglés) suele publicar en su sitio web los datos de defunción de los ciudadanos israelíes por mes y año. El organismo no especifica la causa de la muerte, pero se puede concluir casi con certeza que el exceso de mortalidad en los últimos meses estuvo relacionado con el coronavirus, que hasta ahora se ha cobrado la vida de 2,483 israelíes.
Los datos relativos a septiembre muestran que en 2019 murieron 3,403 personas en Israel, 3,390 en 2018, 3,220 en 2017 y 3,241 en 2016.
Es decir, en años anteriores ha habido un aumento muy moderado de la mortalidad, por lo que se puede concluir que el salto en el número de muertos en septiembre pasado se debe a la pandemia.
También se registró un exceso de mortalidad en agosto, cuando 3,999 personas murieron en Israel, en comparación con las 3,495 fallecidas en agosto de 2019. En este caso se registró un aumento del 14% en la tasa de mortalidad. También se reportó un exceso de mortalidad en julio, que mostró un incremento del 7.5% respecto del mismo mes en 2019.
Se estima que también habrá un exceso de mortalidad en octubre. En los primeros 27 días del mes actual, 895 pacientes murieron a causa del coronavirus en Israel. Este es un dato preocupante, ya que significa que 33 pacientes pierden la vida por el COVID-19 cada 24 horas.
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Sala de terapia intensiva para pacientes con coronavirus del hospital Ichilov, en Tel Aviv.
(Eitan Alchadaz/TPS)
El número de muertos por coronavirus en Israel desde el inicio de la pandemia en el país es de 2,483. La tasa de mortalidad se sitúa en 0.79%. En otras palabras, uno de cada 126 pacientes con COVID-19 falleció en el país. Si bien es una cifra preocupante, es significativamente más baja que el promedio global de 2.66%.
En comparación, la tasa de mortalidad por coronavirus en Italia ahora es del 6.68%, en Irán del 5.72%, en el Reino Unido del 4.79%, en Bélgica del 3.27%, en Francia del 3.01%, en Estados Unidos del 2.75% y en Rusia del 1.72%. Y también hay países donde la tasa de mortalidad es menor que en Israel. En esta lista se encuentran Chipre con 0.65%, Bahrein con 0.39%, Eslovaquia con 0.38% e Islandia con 0.24%.
Otra medida de comparación es el número de muertes por millón de habitantes. En este caso, Israel ocupa el puesto 35 en el mundo con 270 decesos a causa del coronavirus por millón de habitantes, mientras que el promedio mundial es mucho más bajo: 150,5. Este es un índice más confiable que toma en cuenta el tamaño de la población y no el número de infectados, que en algunos países como Israel es significativamente mayor en relación con la población.
