La justicia argentina declaró que el ataque contra la mutual judía AMIA en Buenos Aires, en 1994, fue perpetrado por la organización terrorista Hezbolá y que respondió "a un designio político y estratégico" de Irán, según un fallo dado a conocer el jueves a última hora.
La sentencia de la Cámara Federal de Casación Penal, un tribunal de segunda instancia, también sostuvo que el atentado con bomba contra la sede de la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA) fue un crimen de lesa humanidad.
La decisión deja la puerta abierta para que Argentina demande formalmente a Irán, que se ha negado durante 30 años a colaborar con la justicia local, y pide reformas legales para poder juzgar a los prófugos "en ausencia".
El segundo atentado
En 1992, un atentado con bomba contra la embajada israelí dejó 29 muertos. Dos años después, un camión cargado de explosivos irrumpió en el centro judío AMIA y detonó, dejando 85 muertos y 300 heridos.
El ataque de 1994 nunca ha sido reivindicado ni resuelto, pero Argentina e Israel han sospechado durante mucho tiempo que el grupo chiíta libanés Hezbollah lo llevó a cabo a petición de Irán.
Los fiscales acusaron a altos funcionarios iraníes de ordenar el ataque. Teherán ha negado cualquier implicancia.
Argentina tiene la comunidad judía más grande de América Latina, con unos 300.000 miembros. También es el hogar de comunidades de inmigrantes de Oriente Medio, de Siria y Líbano en particular.
Los jueces dictaminaron este jueves que el ataque a la AMIA fue un crimen de lesa humanidad, y culparon al entonces presidente Ali Akbar Hashemi Bahramaie Rafsanjani, así como a otros funcionarios iraníes y miembros de Hezbolá.
El expresidente argentino Carlos Menem, fallecido en 2021 y presidente en el momento de ambos atentados, fue juzgado por encubrir el atentado a la AMIA, pero finalmente fue absuelto.
Su ex jefe de inteligencia, Hugo Anzorreguy, fue condenado a cuatro años y medio de cárcel por su papel en la obstrucción de la investigación.
Una docena de acusados enfrentaron una serie de cargos de corrupción y obstrucción de la justicia en el caso, incluido el exjuez que dirigió la investigación sobre el ataque, Juan José Galeano, quien en 2019 fue encarcelado durante seis años por ocultamiento y violación de pruebas.