Miles de personas se reunieron en la Plaza Habima de Tel Aviv en la noche del sábado para exigirle al actual primer ministro de Israel que renuncie inmediatamente, luego de las acusaciones de soborno, fraude y abuso de poder. El lema de los manifestantes era "Netanyahu, renuncia, Israel es más importante".
La protesta tuvo lugar cuatro días después de aquella en apoyo a Netanyahu que también contó con una importante concurrencia.
Limor Lieberman, un participante de la manifestación, comentó: "Yo, como ciudadano leal del Estado de Israel, estoy lastimado y siento dolor porque veo que el país se esta pudriendo ante mis ojos, veo que una buena parte de este país ha sido corrompida".
Zvia Degani, otra manifestante, agregó: "Veo que todo se desmorona y no sé lo que dejo aquí para mis hijos. ¿Qué educación y valores les dejo? Netanyahu tiene que irse a casa rápidamente. Ha hecho cosas buenas para el país, pero en los últimos años lo está arruinando. Espero que esto cambie algo ya que por eso estoy aquí".
"Quiero gritar hasta que Netanyahu abandone su lugar", expresó Dorit, quien también acudió a protestar. "Esto no es bueno para el estado. Él es corrupto asi que tiene que irse a casa. Este es nuestro sistema de justicia y si hay una acusación debemos confiar en él".
El Movimiento por un Gobierno de Calidad, que organizó y presenció la marcha, presentó una petición ante el Tribunal Superior exigiendo que Netanyahu renuncie a sus deberes para que pueda atender sus asuntos legales como cualquier ciudadano y no como actual primer ministro.
Mientras esta multitudinaria protesta se llevaba a cabo, otras dos manifestaciones, una a favor y otra en contra de Netanyahu, se desarrollaban frente a la residencia del primer ministro.
En la concentración en defensa de "Bibi" de la última semana, los ciudadanos acudieron con carteles que condenaban al fiscal general Avihai Mandelblit. Más tarde, un grupo de los manifestantes se enfrentaron a periodistas y fotógrafos con insultos y agresiones impidiendo que estos realicen su trabajo.
