Un terrorista palestino que se encontraba en una cárcel israelí tras haber sido condenado a cadena perpetua por asesinato hace 26 años falleció el miércoles de cáncer, indicaron varias fuentes.
Saadi al-Gharabli, de 75 años, nacido en la Franja de Gaza, murió en un hospital israelí como consecuencia de un cáncer, anunció el Club de Prisioneros Palestinos.
Su fallecimiento es el resultado de "negligencias médicas deliberadas", afirmó esta asociación en un comunicado.
La autoridad penitenciaria israelí confirmó el fallecimiento en un hospital israelí de Saadi al-Gharabli, "relacionado con el movimiento islamista Hamás", y "condenado a cadena perpetua por asesinato en en 1994".
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Saadi al-Gharabli, el terrorista palestino de Hamás que falleció de cáncer tras pasar 26 años en una cárcel israelí.
Tenía "una enfermedad en fase terminal", y fue transferido a un hospital al sur de Tel Aviv, indicó esta fuente en un comunicado.
Según la agencia palestina Maan, fue condenado por el asesinato de un soldado israelí en Tel Aviv en 1994.
La organizaciones terroristas Hamás y Yihad Islámica responsabilizaron a Israel por la muerte del prisionero palestino, y emitieron un comunicado conjunto apuntando contra la política de Israel hacia los palestinos que se encuentran encarcelados en el país. “Israel y el Servicio de Prisiones israelí son los responsables por la política de negligencia médica deliberada que derivó en la muerte de muchos prisioneros en las cárceles”, expresaron. “El terror y la agresión con los que deben lidiar los prisioneros nos obliga a actuar para protegerlos. Siempre hemos estado de acuerdo sobre este asunto y se encuentra entre las prioridades de las actividades nacionales y la resistencia, y así seguirá siendo. La resistencia continuará actuando para su liberación. Es su derecho”, agregaron.
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Leah y Simcha Goldin, padres del soldado caído Oron Goldin, cuyo cuerpo se encuentra retenido por Hamás, exigen que no se entregue el cadáver del terrorista a los palestinos.
(AFP)
La familia del soldado israelí Hadar Goldin, cuyo cuerpo se encuentra retenido por Hamás en Gaza, hizo un llamado a las fuerzas de seguridad y a los ministerios de Defensa y de Seguridad Pública para que no entreguen el cadáver del prisionero palestino.
“Las decisiones del gabinete obligan al gobierno a no devolver a terroristas de Hamás para que puedan ser enterrados. En este caso se trata de uno de los prisioneros de peso de la organización”, expresó la familia. “A la luz de casos que ocurrieron en el pasado, creímos que era necesario dirigirnos a los organismos involucrados en este asunto para que Israel no entregue al terrorista hasta que vuelvan los soldados y los civiles [secuestrados] de Gaza”, añadió.
