Israel afirmó el domingo que permitiría el ingreso de combustible financiado por Catar a Gaza para la producción de electricidad en la única planta de energía de la Franja.
"La decisión fue tomada tras una evaluación de seguridad en ese asunto y fue aprobada por el escalón político, y está condicionada a la preservación de la estabilidad de la seguridad", afirmó el organismo de enlace del Ejército con los palestinos (COGAT).
Israel también acordó levantar las restricciones sobre ciertas importaciones a través del paso fronterizo de Kerem Shalom.
Según los informes, todavía no se ha alcanzado un acuerdo sobre la transferencia de dinero de Catar a unas 100.000 familias en Gaza y empleados de Hamás, la organización terrorista que gobierna en la Franja.
El enclave costero, hogar de unos dos millones de palestinos, ha estado bajo un bloqueo conjunto egipcio-israelí desde 2007.
Israel endureció sus restricciones en mayo durante un conflicto de 11 días con Hamás.
La semana pasada, Israel renovó el servicio postal al territorio y permitió que se reanudaran algunas exportaciones de productos agrícolas y ropa.
También amplió la zona de pesca que otorga a Gaza, de seis a nueve millas náuticas, y permitió la importación de materias primas para "fábricas civiles esenciales".
Israel alivió las restricciones en medio de un alto el fuego que entró en vigor el 21 de mayo y puso fin a los combates más letales entre Israel y Hamás desde 2014.
El alto el fuego se ha mantenido en gran medida, aunque a principios de este mes, terroristas palestinos lanzaron globos explosivos hacia el sur de Israel, provocando incendios en tierras agrícolas. El Estado judío respondió bombardeando posiciones de Hamás en Gaza.