El Gabinete del Coronavirus del gobierno israelí decidió en la madrugada del lunes, después de un debate de horas, reabrir las escuelas el 1° de septiembre tal como estaba programado a pesar del aumento de casos de coronavirus en el país.
Durante una reunión que comenzó el domingo por la noche, los ministros también aprobaron el suministro de vacunas en establecimientos escolares a niños mayores de 12 años, sujeto a la aprobación de los padres.
De acuerdo con el esquema votado, los padres recibirán kits de diagnóstico de COVID-19 para testear a sus hijos en sus casas y firmar una nota indicando el resultado negativo.
Los ministros también aprobaron el suministro de vacunas en establecimientos escolares a niños mayores de 12 años
En las ciudades catalogadas como “rojas”, por sus altas tasas de contagio, los estudiantes de octavo a duodécimo grado tendrán clases de forma virtual a excepción de los casos en que el 70% de los alumnos ya estén vacunados.
Los ministros también decidieron implementar la política del Pasaporte Verde para todos los profesores y el personal de las escuelas, lo cual exigirá la presentación del certificado de vacunación o de recuperación de COVID-19, o en su defecto un test negativo en el ingreso a los establecimientos escolares. Según el Ministerio de Educación, unos 37.000 profesores aún no han sido vacunados.
El domingo Israel lanzó su campaña de pruebas de anticuerpos para niños de tres años en adelante en busca de información sobre la cantidad de personas no vacunadas que ya desarrollaron protección contra el virus.
La encuesta serológica nacional, que es realizada conjuntamente por los ministerios de Salud y Educación y por el Ejército de Israel, apunta a los casi 1,5 millones de estudiantes de entre tres y 12 años que aún no pueden ser vacunados.
El objetivo es descubrir cuántos niños desarrollaron anticuerpos contra el coronavirus después de cursar la enfermedad de forma asintomática o no registrada.
Los niños con una protección de anticuerpos robusta no tendrán que aislarse en caso de ser considerados contacto estrecho de un caso confirmado de COVID-19, una medida destinada a limitar las interrupciones del cronograma escolar.
El jueves pasado, Israel comenzó a ofrecer la tercera dosis de la vacuna contra el coronavirus a la población mayor de 40 años. Hasta el domingo, alrededor de 1,4 millones de personas ya habían recibido la dosis de refuerzo, tres semanas después de que se abriera esa posibilidad para personas mayores de 60 años.