El fiscal general saliente de Israel dio su visto bueno a un acuerdo entre el gobierno y los colonos de Cisjordania que autorizaría de forma retroactiva un puesto de avanzada establecido sin aprobación oficial, informaron este miércoles varios medios de comunicación israelíes.
La medida impulsa el acuerdo, que todavía necesita la luz verde final del ministro de Defensa del país, Benny Gantz, que firmó el plan el año pasado.
Esto pone aún más en aprietos a la frágil coalición de gobierno, ideológicamente diversa, que incluye partidos que apoyan y se oponen a la creación de un Estado palestino.
Los críticos denunciaron que la aprobación retroactiva del puesto de avanzada salvaje era una recompensa para los colonos que infringen la ley, en un momento en que la violencia de los colonos contra los palestinos aumentó
En virtud del acuerdo alcanzado el año pasado, los colonos abandonaron el puesto de avanzada de forma pacífica y la zona se convirtió en una zona militar cerrada, manteniéndose las casas y las carreteras construidas. Como parte del acuerdo, se llevó a cabo un estudio que, según los medios de comunicación, determinó que parte de la tierra no era propiedad de los palestinos, lo que allanó el camino para la creación de una escuela religiosa y el regreso de algunas familias.
El Ministerio de Justicia de Israel declinó hacer comentarios. La oficina del primer ministro, Naftali Bennett, no respondió inmediatamente a una solicitud de comentarios.
Los críticos denunciaron que la aprobación retroactiva del puesto de avanzada salvaje era una recompensa para los colonos que infringen la ley, en un momento en que la violencia de los colonos contra los palestinos aumentó.
Casi 500.000 colonos viven en más de 130 asentamientos autorizados por Israel, así como en decenas de puestos de avanzada que el Estado considera ilegales en los territorios de Cisjordania
Michal Rozin, legislador de la facción Meretz, que forma parte del gobierno y apoya la creación de un Estado palestino, explicó que la aprobación era "una victoria para la violencia de los forajidos en los puestos de avanzada", y señaló en un tuit que la medida violaba la decisión de la coalición de evitar cuestiones divisivas para garantizar su estabilidad.
Los colonos llamaron al puesto de avanzada Evyatar, en honor a un israelí asesinado por un palestino en 2013, y dicen que era el hogar de docenas de familias. El acuerdo para desalojar a las familias se produjo justo después de que se formara el frágil gobierno del país y parece haberse alcanzado como una forma de evitar el espectáculo mediático de las tropas arrastrando por la fuerza a israelíes.
Los palestinos de las aldeas cercanas afirman que el puesto de avanzada se construyó en sus tierras y temen que crezca y se fusione con otros asentamientos más grandes. Antes de que los colonos se marcharan, los palestinos celebraban protestas casi diarias que provocaban violentos enfrentamientos con tropas israelíes.
Israel capturó Cisjordania en la Guerra de los Seis Días de 1967 y los palestinos quieren que constituya la parte principal de su futuro Estado.
Casi 500.000 colonos viven en más de 130 asentamientos autorizados por Israel, así como en decenas de puestos de avanzada que el Estado considera ilegales en los territorios de Cisjordania. Israel concedió en repetidas ocasiones la aprobación retroactiva de estos asentamientos ilegales.
Los palestinos y gran parte de la comunidad internacional consideran que todos los asentamientos son una violación del derecho internacional y un obstáculo para la paz.