Yair Lapid, ministro de Relaciones Exteriores de Israel, conversó este miércoles en Washington con Antony Blinken, secretario de Estado de Estados Unidos, y el canciller emiratí Abdullah Bin Zayed Al Nahyan.
“Israel se reserva el derecho de actuar contra el programa nuclear iraní en cualquier momento, en cualquier situación y de cualquier forma”, le dijo Lapid a sus homólogos aliados. “No es solamente nuestro derecho,sino nuestro deber. Irán dijo públicamente que quiere borrarnos de la faz de la tierra y no tenemos intenciones de ser exterminados”, agregó el ministro israelí en su segunda jornada de reuniones en la capital estadounidense.
Blinken destacó que “Israel tiene derecho a defenderse y lo apoyamos”, pero señaló que continuarán apostando al diálogo con Teherán: “Creemos que una solución diplomática con Irán es lo mejor y queremos ver una respuesta, aunque las reacciones y la falta de respuestas de Irán no son alentadoras”.
“Estamos listos para buscar más opciones si Irán no cambia de dirección”, agregó el funcionario estadounidense. Lapid recordó que el objetivo conjunto de Jerusalem y Washington es “evitar que Irán se convierta en un país con armas nucleares” y afirmó que viajó a la Casa Blanca debido a los avances de las capacidades nucleares de Irán. “Israel no necesita permiso para operar contra Irán”, advirtió.
“Las negociaciones están estancadas y los iraníes tratan de ganar tiempo, engañan al mundo mientras continúan enriqueciendo uranio y desarrollando su programa de misiles balísticos”, denunció el canciller israelí. “Cada día que pasa, cada nueva dilación de las negociaciones, acerca a Irán a la bomba nuclear”, sostuvo.
Bin Zayed, por su parte, incorporó a la agenda de la cumbre la cuestión palestina. “Es imposible hablar de paz en la región sin una solución al conflicto entre palestinos e israelíes. No hay diálogo, pero me emociona ver que en las últimas semanas ministros israelíes se reunieron con funcionarios de la Autoridad Palestina”, resaltó.