El gabinete de seguridad aprobó el miércoles por la noche un plan para intensificar los ataques militares contra Hamás y los objetivos de la Yihad Islámica en la Franja de Gaza, luego de que el primer ministro Benjamin Netanyahu informara a sus miembros que Israel ha rechazado oficialmente una propuesta de Hamás para un alto el fuego.
Israel rechazó la oferta de tregua hecha horas antes a través del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia, que citó a un alto funcionario de Hamás diciendo que el grupo islamista estaba listo para detener los ataques sobre una "base mutua".
"La campaña aún está lejos de terminar", dijo un miembro del gabinete. "Todo lo que no hagamos ahora, lo tendremos que hacer en seis meses o un año a partir de ahora", agregó.
También se pidió a los miembros del gabinete que aprobaran los planes operativos para los próximos días.
"Israel no se detendrá y no tiene ningún interés en hacerlo. Todo avanza en la dirección correcta. Actuaremos hasta que admitan que abrir fuego fue un error, tal como lo hizo el líder de Hezbolá, Hassan Nasrallah, después de la Segunda Guerra del Líbano en 2006", añadió.
"Cuando hayamos alcanzado todos nuestros objetivos y el otro lado aún no se haya rendido, lanzaremos una operación terrestre, aunque no la hayamos buscado", agregó la fuente consultada.
"Israel no se detendrá y no tiene ningún interés en hacerlo. Todo avanza en la dirección correcta. Actuaremos hasta que admitan que abrir fuego fue un error"
Altos funcionarios también dijeron que las FDI no habían sido tomadas por sorpresa por las capacidades de Hamás en la ronda de combates. "No nos sorprendió, ni la escala de los cohetes ni sus capacidades", señalaron.
"Más de 1.000 cohetes fueron disparados desde la Franja de Gaza contra Israel y un tercio de ellos cayó dentro de Gaza. De los 700 restantes, la mitad cayó en áreas abiertas y el 90% de los 350 cohetes restantes fueron interceptados", informaron desde el gabinete.
El funcionario comentó que el principal logro de Israel durante la campaña actual, denominada Operación Guardián de los Muros, fue la eliminación de altos funcionarios de Hamás y la Yihad Islámica.
"Este fue un logro asombroso del servicio de seguridad Shin Bet, que logró rastrear a estos funcionarios en sólo dos días", señalaron.
El miércoles fue el tercer día consecutivo de lanzamiento de cohetes desde Gaza contra centros de población israelíes, en una ronda de ataques que comenzó el lunes por la noche con una descarga lanzada en el área de Jerusalem, después de días de enfrentamientos en la ciudad entre palestinos y fuerzas de seguridad israelíes.
Ese ataque inicial fue seguido por un intenso y continuo lanzamiento de cohetes contra las comunidades del sur, que dejaron dos muertos en Ashkelon y decenas de heridos. El martes por la noche, se dispararon dos salvas masivas en el centro de Israel, matando a una persona en Rishon Lezion y a un padre y su hija adolescente en Lod.
Israel respondió a los cohetes con repetidos ataques aéreos y de artillería contra lo que dice que eran objetivos terroristas en Gaza.
Un total de seis personas murieron en el lado israelí por disparos de cohetes, incluida la primera muerte de un soldado israelí en esta ronda de conflicto. Decenas más han resultado heridas.
El número de muertos en Gaza aumentó el miércoles a 53, incluidos 14 niños, según el Ministerio de Salud en el enclave dirigido por Hamas. Al menos 320 han resultado heridos.