El ministro de Asuntos Exteriores de la Unión Europea, Josep Borrell, está presionando para que se impongan sanciones personales contra el ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben-Gvir, y el ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich. Borrell, que afirma que los dos están incitando a crímenes de guerra, intentará persuadir a los ministros de Asuntos Exteriores de la UE en su reunión informal del jueves para que aprueben una resolución sobre las sanciones por el "repetido discurso de odio de los dos ministros israelíes".
A pesar de la inusual medida, la evaluación en Israel es que la propuesta de Borrell es completamente inviable, ya que se requiere el acuerdo de los 27 países de la UE, y no habrá consenso sobre este tema.
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El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, se sumó a Josep Borrell e hizo fuertes declaraciones contra Itamar Ben-Gvir.
(Ynet)
Borrell dejará el cargo a finales de octubre. A pesar de que su iniciativa no es viable, en la Unión Europea hay críticas muy duras a Ben-Gvir y Smotrich, incluso por parte de amigos de Israel en el continente. Fuentes diplomáticas dijeron que "están causando a Israel un daño muy grave y un buen material para cualquiera que presente demandas contra nosotros y promueva iniciativas de boicot y sanciones".
Mientras tanto, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Turquía emitió una fuerte declaración contra el ministro Ben-Gvir luego de su llamado de ayer para construir una sinagoga en el Monte del Templo. Según el comunicado, "las declaraciones del ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben-Gvir, sobre la construcción de una sinagoga en la Mezquita de Al-Aqsa son un nuevo y extremadamente peligroso ejemplo de los esfuerzos de Israel para cambiar el estatus y la identidad de Jerusalem y los lugares sagrados de Jerusalem".
Ankara agregó: "Estas declaraciones han provocado indignación en el mundo islámico y alarmado a cualquiera con sentido común. Las provocaciones contra la Mezquita de Al-Aqsa, un lugar sagrado que pertenece exclusivamente a los musulmanes, hieren los sentimientos de los musulmanes y causan tensión en todo el mundo. Los ataques del gobierno israelí contra el pueblo palestino amenazan cada día más la estabilidad regional y mundial. Es hora de que la comunidad internacional actúe para detener la agresión israelí y proteger al pueblo palestino". Ben-Gvir fue amenazado esta noche por Zaher Jabarin, jefe de Hamas en Cisjordania, quien le dijo a Al Jazeera: "Háganle saber que su destino será el mismo que el de todos los extremistas que atacaron nuestros lugares sagrados".
El ministro de Relaciones Exteriores jordano, Ayman Safadi, tuiteó: "Pedimos al Consejo de Seguridad y a todos los miembros de la comunidad internacional que tomen medidas efectivas e inmediatas para detener las medidas ilegales israelíes que violan el statu quo histórico y legal en los lugares sagrados de la Jerusalem ocupada".
Y añadió: "Como potencia ocupante, Israel es legalmente responsable de proteger el estatus histórico y legal. El Consejo de Seguridad debe aprobar una resolución vinculante que impida que Israel cometa nuevas violaciones y se intensifiquen las violaciones de derechos humanos en la Mezquita de Al-Aqsa. Esto debe hacerse antes de que sea demasiado tarde. La situación ya es explosiva. Las consecuencias serán peligrosas. Tomaremos todas las medidas posibles, incluidas las acciones legales en los tribunales internacionales, para ayudar a proteger los lugares sagrados de Jerusalem y su identidad árabe, musulmana y cristiana".
En los últimos meses, ha habido informes de que las sanciones contra Ben-Gvir y Smotrich también han sido consideradas por los Estados Unidos. Aunque ocupan puestos relativamente altos en la mesa del gobierno, de hecho son boicoteadas en todo el mundo, y ni en los Estados Unidos ni en Europa los altos funcionarios tienen relaciones de trabajo o reuniones con ellos.
En el último año, Estados Unidos y la Unión Europea han impuesto sanciones contra colonos extremistas y varias ONG israelíes, como Order 9 y Lehava. Las sanciones se impusieron principalmente a propietarios de granjas que presuntamente habían actuado violentamente contra palestinos. Además, se informó anteriormente que Estados Unidos estaba considerando imponer sanciones al Batallón Netzah Yehuda, que sirve en los territorios.
Según un comunicado de la Casa Blanca, la última ronda de sanciones se impuso a "individuos que socavan la paz, la seguridad y la estabilidad en Cisjordania y participan en altos niveles de violencia extrema, desplazamiento forzado de personas y aldeas, y destrucción de propiedades".
