Viven en hoteles y barrios privados, exhiben sus coches de moda y cenan en restaurantes de lujo, mientras sus ciudadanos sufren como resultado directo del ataque terrorista que lideraron.
Mientras las FDI toman puntos claves de Hamás, sus líderes disfrutan de una gran impunidad en el extranjero mientras aumentan sus arcas de dinero.
El líder de Hamás, Ismail Haniyeh, su predecesor en el cargo, Khaled Meshal, y el actual diputado, Musa Abu Marzouk, tienen -según estimaciones- un patrimonio de varios miles de millones de dólares.
Según el periódico alemán "Bild", Haniyeh es el más rico de los tres, aunque afirma que sólo vive del aceite de oliva. Padre de 13 hijos, vive en hoteles 5 estrellas de Qatar y Turquía.
Además, el jefe del buró político de Hamás vuela en aviones privados entre Teherán, Estambul, Moscú y El Cairo y, según Bild, su fortuna se estima en 2,5 mil millones de dólares.
En una publicación de la embajada de Israel en Estados Unidos se habla de que su fortuna asciende a 3.200 millones de dólares.
Dos de los hijos de Haniyeh, Maaz y Abdel Salam, aparecen documentados en Instagram en hoteles de Estambul y Doha. De hecho, hace un año se publicó un artículo sobre uno de los hijos en el periódico saudita "Ilaaf", titulado: "Maaz Haniyeh: una vida de extravagancia, alcohol y mujeres".
Maaz, un rico magnate inmobiliario, es conocido en Gaza como "El padre de las bienes raíces", porque posee apartamentos, villas y edificios. En Turquía, a menudo se lo ve al lado de mujeres casadas y disfruta del alcohol, a pesar de su fe religiosa. Incluso fue fotografiado hace dos años junto a su padre, el líder de Hamás, cuando presentaba un nuevo coche de lujo en las calles de Gaza.
Su hermano Abdel Salam fue denunciado después de que se descubrió que transfirió fondos a su cuenta como parte de su papel como embajador deportivo en el Consejo Shura de Hamás.
Khaled Mashal , que durante 21 años fue jefe del buró político de Hamás y uno de sus fundadores, vive como Haniyeh en Qatar y, a veces, en Estambul. En 1997 se salvó de morir en una operación fallida del Mossad en Jordania.
El diario "Bild" escribe que cuando abandonó Siria se llevó 1.500 millones de dólares de las oficinas de Hamás en Damasco. En Israel se estima que su fortuna es aún mayor: entre 4 y 5 mil millones de dólares.
Musa Abu Marzouk , jefe adjunto del Buró Político, se mueve principalmente sobre el eje Damasco-El Cairo. Vivió durante 14 años en Estados Unidos y fue arrestado en 1994 por apoyar el terrorismo. Dos años después fue deportado y trasladado a Jordania, de allí a Siria y en 2012 a Egipto.
A pesar de su arresto, conservó su dinero y, según "Bild", su fortuna se estima en dos mil millones de dólares pero según la embajada de Israel en EE.UU., la fortuna llega a los 3 mil millones de dólares.
Durante la guerra actual, su hermano Yosef murió en un bombardeo en Rafah.
Además de estos tres altos funcionarios de Hamás, Bild también menciona a un multimillonario prácticamente desconocido: Hisham Younis Kapisha, considerado uno de los principales financistas de la organización terrorista.
En 2022, fue incluido en la lista de personas a las que Estados Unidos impone sanciones por "participar en actividades de Hamás y ocupar puestos clave en varias empresas controladas por la organización".
El "Daily Mail" también detalló las estimaciones sobre la forma en que Hamás y sus líderes acumularon su riqueza.
"Históricamente, los palestinos exiliados y los donantes privados de Oriente Medio fueron quienes financiaron la organización, junto con fondos islámicos en Occidente", escribieron, mencionando además el hecho de que Israel permitió a Qatar transferir millones de dólares de ayuda a Gaza en efectivo.
Hamás obtuvo sus propios ingresos mediante el uso de un amplio sistema de túneles, uno de cuyos objetivos era rodear el cruce de Rafah con Egipto en el sur de la Franja de Gaza y permitir la introducción de alimentos, medicinas, combustible, dinero y, por supuesto, armas.
Egipto permitió la entrada de mercancías y, a partir de 2021, Hamás recibió de allí 12 millones de dólares al mes en concepto de impuestos.
Además, Irán es uno de los mayores donantes y, según estimaciones, envía
100 millones de dólares al grupo terrorista, la Jihad Islámica y otras organizaciones en la Franja de Gaza.
Turquía afirma que sólo apoya al ala política de Hamás, pero también fue acusada de financiar actividades terroristas mediante ayuda desviada.