La agencia estatal de noticias de Siria, Sana, anunció esta noche en un dramático anuncio que el gobernante de facto del país, el líder de la organización rebelde jihadista, Abu Muhammad al-Golani, ha sido nombrado oficialmente presidente, aparentemente sólo para el período de transición temporal anunciado después de la caída del régimen de Assad en diciembre. Hasta ahora, Al-Golani ha liderado efectivamente el nuevo régimen que se estableció, pero sin un título oficial.
La declaración de Sana también señala que el ejército de la era de Assad sería desmantelado y que se establecería uno nuevo "sobre una base nacional". Además, se anunció oficialmente el desmantelamiento de "todas las organizaciones militares, revolucionarias, políticas y civiles", en referencia a las diversas milicias rebeldes que tomaron el poder después de 14 años de guerra civil. "Se consolidarán en instituciones del Estado", anunció.
Al-Golani también ordenó el establecimiento de un parlamento provisional hasta el final del período de transición provisional, al final del cual prometió que se redactaría una nueva constitución. Sin embargo, recientemente señaló que no será posible celebrar elecciones en Siria en los próximos años. Anteriormente, Al-Golani pronunció un discurso descrito por los medios de comunicación del país como un "discurso de victoria", en el que dijo: "Hemos roto los grilletes del régimen de Assad y el sol de Siria ha salido. La victoria se logró sin destrucción y sin derramamiento de sangre. Siria necesita hoy la determinación para construirla y desarrollarla. La tarea es pesada y la responsabilidad es grande".
En sus comentarios, Al-Golani describió las prioridades de su nueva administración: "llenar el vacío gubernamental, mantener la paz civil, construir instituciones estatales, construir una estructura económica y de desarrollo, y rehabilitar la posición internacional y regional de Siria". En una conferencia en Damasco, el portavoz de la Dirección de Operaciones Militares del nuevo régimen, Hassan Abd al-Rani, también declaró el 8 de diciembre, cuando el régimen de Assad fue derrocado, como un nuevo día nacional.
"Estamos anunciando el desmantelamiento del ejército del régimen caído y la reconstrucción del ejército sirio sobre bases nacionales", dijo Al-Rani en la conferencia. "Anunciamos el desmantelamiento de todos los aparatos de seguridad identificados con el régimen anterior, y todas las milicias que estableció, y el establecimiento de una nueva institución de seguridad que proteja la seguridad de los ciudadanos. Todas las facciones militares y los cuerpos revolucionarios, políticos y civiles serán desmantelados e integrados en las instituciones del Estado", agregó, anunciando también el nombramiento de Al-Golani como presidente "en la fase de transición", subrayando que uno de sus deberes sería "representar a Siria en los foros internacionales".