Después de revelar la afiliación militar con Hamas y la Jihad Islámica de seis periodistas de Al Jazeera en Gaza, las FDI presentaron el jueves documentos adicionales que indican la estrecha cooperación entre la organización terrorista y el canal de noticias catarí. En esos documentos se establece la prohibición de critiar a Hamás, ocultar casos de lanzamientos de cohetes fallidos y establecer una línea segura de comunicación entre las partes.
Uno de esos documentos de 2022 se describe cómo Hamás dio instrucciones claras a Al Jazeera para cubrir un fallido evento de lanzamiento de la Jihad Islámica en Jabaliya que mató a varios palestinos. Una de las instrucciones fue no usar la palabra "masacre" para describir el evento, y otras instrucciones fueron reducir la visualización de fotos y no permitir que los panelistas criticaran a Hamás. "Le recomendamos que se ponga en contacto con los líderes de la Jihad para comprender las directrices de la organización y destacar sus esfuerzos en la creación y el desarrollo de capacidades", escribió Hamás a la red qatarí.
Otro documento del mismo año revela las instrucciones que Hamás dio al periodista Tamer al-Mashal para cubrir las actividades de la Jihad Islámica en la Operación Amanecer. En un plan que presentó, llamado "El Rabino Oculto", la organización terrorista le instruyó que apoyara la "resistencia" en la Franja de Gaza y que no permitiera críticas a las capacidades de cohetes de la Jihad Islámica, dado el alto número de lanzamientos fallidos.
Además, un documento de 2023 muestra que Hamás había decidido establecer un "teléfono de Al Jazeera", una línea segura que permitía a la organización comunicarse con el canal de forma clasificada y en caso de emergencia. "Los documentos muestran cómo Hamás dirige la cobertura mediática de Al Jazeera según sus propios intereses, impidiendo que el público de Gaza y de todo el mundo descubra la verdad sobre sus crímenes contra la población de Gaza."
Ayer, las FDI revelaron información de inteligencia y documentos encontrados en la Franja de Gaza que confirman la afiliación militar con Hamás y la Jihad Islámica de seis periodistas de Al Jazeera en Gaza: Anas al-Sharif, Alaa Salameh, Husam Shabat, Ashraf al-Sarraj, Ismail Abu Omar y Talal al-Arrouqi. Los documentos incluyen tablas de personal, listas de cursos de entrenamiento terrorista, guías telefónicas y documentos de salarios de los terroristas "que prueban inequívocamente que funcionan como operativos terroristas militares de las organizaciones terroristas en la Franja de Gaza".
El portavoz de las FDI agregó que "estos documentos son prueba de la integración de los terroristas de Hamas en la red de medios de comunicación catarí, Al-Jazeera". Según él, "la mayoría de los periodistas denunciados por las FDI como agentes del ala militar de Hamás son la 'punta de lanza' de la difusión de los mensajes propagandísticos de la organización terrorista Hamás como parte de su trabajo en Al-Jazeera, especialmente en el norte de la Franja de Gaza".
Mientras tanto, el primer ministro y ministro de Relaciones Exteriores de Catar, Mohammed al-Thani, fue preguntado hoy sobre las acusaciones de las FDI sobre la participación de periodistas de Al Jazeera en el terrorismo, y dijo que "Al Jazeera debe actuar si hay algo de verdad en las acusaciones de Israel contra sus periodistas". En una conferencia de prensa posterior a su reunión con el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, Al-Thani agregó que "estas acusaciones deben tratarse con escepticismo".
"Estamos muy orgullosos de Al Jazeera y su cobertura de las guerras", continuó el funcionario catarí. "Al Jazeera opera de acuerdo con los más altos estándares internacionales para la cobertura de prensa. No hay justificación para atacar a periodistas en zonas de conflicto, y las excusas para hacerlo son inaceptables". A Blinken también se le preguntó al respecto, y dijo que no podía verificar las afirmaciones israelíes.
Cabe recordar que las emisiones de Al-Jazeera fueron definidas por el gobierno como constitutivas de un "verdadero golpe a la seguridad del Estado", por lo que el pasado mes de mayo se prohibió a la cadena qatarí emitir en Israel. Cuatro meses después del cierre de las oficinas de la cadena en Israel, los soldados de las FDI entraron en sus oficinas de Ramala con una orden de cierre de 45 días, confiscando equipos y documentos.