Este sábado al mediodía, un ataque atribuido a Israel a las afueras de Damasco, Siria, abatió a cinco personas, todas ellas miembros de Hezbollah y otras milicias chiítas. Según fuentes militares sirias, el bombardeo tuvo como objetivo un cargamento de armas avanzadas que eran trasladadas a Líbano.
Por su parte, los medios estatales sirios citaron una declaración militar que informaba que las defensas aéreas locales habían interceptado "objetivos hostiles lanzados desde los territorios ocupados" dirigidos a los alrededores de la capital Damasco. No se supo de inmediato qué quería decir la televisión con "territorios ocupados", aunque presuntamente apuntaba a Israel.
Este último año, alarmadas por la creciente influencia regional de Irán y su importante presencia militar en Siria, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han llevado a cabo cientos de ataques en el país gobernado por el presidente Bashar al-Assad con el objetivo de frenar el atrincheramiento iraní.
El grupo de oposición del Observatorio Sirio de Derechos Humanos con sede en el Reino Unido dice que cinco personas han muerto en el ataque, todas ellas miembros de Hezbollah y otras milicias chiítas.
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos, con sede en el Reino Unido, informó que el área donde se produjo el ataque alberga depósitos de armas pertenecientes a Hezbollah y otros representantes iraníes, así como bases de las Fuerzas Armadas de Siria.
Por su parte, el canal de noticias libanés Al Mayadeen precisó que el bombardeo fue llevado a cabo por Israel cerca de la ciudad de Al-Dimass, al oeste de la capital y de camino a Beirut, Líbano.
Cuando se le preguntó sobre el ataque, un portavoz de las Fuerzas de Defensa de Israel dijo: "No comentamos sobre los informes de los medios extranjeros".