Después de la decisión de prohibir a las empresas israelíes exponer en la feria de armas navales más grande del mundo, Euronaval, programada para celebrarse en París, la empresa organizadora anunció que se les permitiría exponer, siempre que no fueran parte del esfuerzo de seguridad israelí en Gaza y el Líbano. Pero, de hecho, no hay ninguna empresa israelí que no haya formado parte del esfuerzo bélico, por lo que el anuncio no cambia nada.
Un comunicado publicado ayer en el sitio web de la exposición decía sobre la presencia de empresas israelíes en la feria: "Los organizadores de la exposición reconocen la decisión del Consejo Nacional de Defensa y Seguridad, que establece que las empresas israelíes interesadas en participar en la exposición Euronaval tienen derecho a hacerlo. Pueden tener un stand en la exposición, siempre que sus productos no se hayan utilizado en la operación militar en Gaza y el Líbano".
Pero, como se ha señalado, la importancia práctica de esto es que la feria "sólo" prohibirá la participación de las empresas israelíes que participaron en los combates en Gaza o el Líbano, es decir, todas. Se trata de una exposición en la que cada año participan cientos de empresas internacionales que desarrollan buques de guerra y armas navales, entre ellas muchas empresas israelíes.
En los próximos días, Israel Shipyards presentará una petición al respecto ante un tribunal francés. Israel Shipyards debía presentar en la exposición el Mini Kingfisher, un barco rápido diseñado para el reconocimiento y la intercepción y apto para navegar en aguas poco profundas, el barco Opv45 desarrollado en el astillero de Haifa en los últimos años, y el Reshef S80, un modelo similar del que se espera que ingrese a la Armada israelí en los próximos años. "El boicot de seguridad a Israel requiere que Israel confíe en sí mismo y desarrolle una industria militar estratégica, local e independiente", dijo Eitan Zucker, director ejecutivo de Israel Shipyards.
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Una manifestación propalestina frente a la exposición de armas en París en junio pasado.
(AP)
Esta es la segunda vez que Francia decide prohibir a las empresas israelíes participar en prestigiosas exposiciones de armas, después de que se les prohibiera exponer en la feria Eurostory el pasado mes de junio y a los israelíes se les prohibiera la entrada a la exposición. Tras el estallido de la tormenta, el gobierno francés apeló a un tribunal y la decisión fue revocada, pero la mayor parte del daño ya estaba hecho.
Doce empresas israelíes estaban interesadas en exponer en la feria naval, y si esta tendencia negativa continúa, es casi seguro que Israel se verá impedido de entrar en el Salón Aeronáutico de Le Bourget, la joya de la corona de las exposiciones. No tendrá lugar hasta junio, pero se están haciendo los preparativos con muchos meses de antelación. Una fuente israelí dice que Francia se ha convertido en un símbolo de izquierda en el mundo con respecto al embargo a Israel, señalando que entre bastidores las empresas francesas han pedido al presidente francés, Emmanuel Macron, que prohíba la participación de empresas israelíes por razones comerciales.
