Días después de la ceremonia que se realizará en Jerusalem por el 75° aniversario de la liberación de Auschwitz, otro evento conmemorativo se llevará a cabo en donde funcionó el campo de exterminio polaco.
En este, se conmemorarán dos hechos relacionados a la memoria de la Shoá: el 20° aniversario de la adopción de la Declaración de Estocolmo, bajo la cual se estableció la Alianza Internacional para el Recuerdo del Holocausto; y el 15° aniversario de la adopción del 27 de enero como el Día Internacional de Conmemoración en Memoria de las Víctimas del Holocausto.
Una delegación de unos 120 sobrevivientes de Estados Unidos, Canadá, Israel, Australia y varios países europeos participarán del evento, y se espera que más se hagan presentes.
Asimismo, confirmaron su participación, además del presidente polaco Andrzej Duda, representantes de los gobiernos de Australia, Austria, Chipre, República Checa, Estonia, Finlandia, Alemania, Grecia, Hungría, Irlanda, Israel, Letonia, Lichtenstein, Luxemburgo, Malta, los Países Bajos, Noruega, Portugal, Rusia, Serbia, Eslovenia, España, Suecia, Suiza, Turquía, el Vaticano, y el Reino Unido.
La ceremonia se da en un clima de tensión entre Polonia y Rusia luego de que el presidente Vladimir Putin afirmara que el gobierno de Polonia antes de la guerra admiraba a Adolf Hitler y estaba listo para “erigir una estatua de él en Varsovia”. Putin también llamó al embajador polaco en Berlín de esa época “un cerdo antisemita”.
Estos comentarios desataron el escándalo en Polonia, y, temiendo que Putin repitiera sus afirmaciones en la ceremonia en Yad Vashem, Duda exigió brindar un discurso, pero su solicitud fue rechazada.