El Wall Street Journal, en un editorial publicado el viernes por la mañana, criticó duramente al presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, y a su administración por su postura crítica hacia el primer ministro Benjamin Netanyahu y el hecho de que Biden hasta ahora se abstuvo de invitar al líder israelí para la tradicional visita a la Casa Blanca.
"¿Por qué el presidente Biden hace todo lo posible para desairar, criticar y dar órdenes de marcha al gobierno de Israel? Al menos retóricamente, el presidente y su administración tratan al primer ministro Benjamin Netanyahu y su coalición gobernante peor que a los mulás gobernantes en Irán", comienza el editorial.
El Wall Street Journal es conocido como un periódico políticamente derechista, y a menudo critica a Biden y su administración. El editorial se produce pocos días después de una columna de Thomas Friedman, comentarista principal del New York Times, un periódico que tiende a inclinarse políticamente hacia la izquierda, en la que evaluó que la administración Biden ahora está "reevaluando" su política hacia Israel, aunque la Casa Blanca lo negó.
El editorial del Wall Street Journal mencionó las recientes críticas de Biden a los socios de coalición de Netanyahu, aunque no mencionó su afirmación de que es el "gobierno más extremo" que ha visto, ni las declaraciones críticas hechas por el embajador saliente de Estados Unidos, Tom Nides. "Cada burla aparece en los titulares en Israel", señala el periódico, y destaca que Biden se ha mantenido crítico con Netanyahu aun cuando anunció un alto a la legislación de reforma judicial en marzo después de protestas callejeras masivas.
El artículo argumenta que las críticas de Washington están causando que los israelíes sientan que Estados Unidos se está poniendo del lado de la oposición en Israel. "Esta no es forma de tratar a un aliado democrático y no hay forma de perseguir los intereses de Estados Unidos mientras el Partido Likud del Sr. Netanyahu esté en el poder, como lo ha estado durante la mayor parte de los últimos 25 años".
Con respecto a la reforma judicial en sí, el artículo dice: "Si las reformas propuestas por Israel frenarían los poderes inusuales de su alto tribunal, en ausencia de una constitución, o inclinarían la balanza demasiado hacia la supremacía parlamentaria al estilo británico, es para que los israelíes debatan. Lo que hacen, ruidosamente, sin el comentario del señor Biden".
Además, el autor sostiene que la política de Biden socava el objetivo de restringir a Irán. "Mientras el señor Biden socava al gobierno de Netanyahu, Hamas y otros representantes iraníes están ganando poder en Cisjordania, activando otro frente contra Israel. La nueva ola de terrorismo contra civiles judíos hará retroceder la causa palestina, pero hará avanzar la de Irán".
El periódico también expresa su decepción por la falta de progreso con respecto a los esfuerzos de normalización con Arabia Saudita, aunque algunos pueden argumentar que esto se debe a que el gobierno derechista de Netanyahu enfrenta dificultades.
Según el artículo, la razón es la política crítica de Biden hacia Arabia Saudita. El editorial afirma que su "hostilidad" hacia Riad lo ha "llevado" a firmar el acuerdo, facilitado por China, para renovar las relaciones con Irán, en un esfuerzo por minimizar la amenaza percibida de Irán. "La normalización con Israel puede tener que esperar a un presidente de Estados Unidos interesado en reunir una coalición para contener a Teherán", añade el periódico.