El miércoles por la noche, Israel asestó un golpe sorpresa a Hamás en la Franja de Gaza y puso fin al alto el fuego. Esto se produjo después de dos semanas y media de negociaciones, durante las cuales no se registraron logros, y el escalón político insiste en que sólo la presión militar conducirá a la liberación de los rehenes. Al mismo tiempo, hay otro objetivo de guerra que Israel se ha fijado y que hasta ahora parece estar lejos de realizarse: la destrucción de las alas militares y gubernamentales de Hamás en Gaza.
En las últimas 24 horas, fuentes de la organización han sido citadas en varios medios de comunicación de todo el mundo. La cobertura internacional se ha centrado en la reconstrucción de Hamás y en la cuestión de si Israel podrá poner fin a su dominio en la Franja de Gaza. Con la reanudación de los combates, Israel se ha centrado en varios altos cargos del ala gobernante de la organización, encabezada por el primer ministro de Hamás, Issam Daalis.
Según fuentes de Hamás citadas por Reuters, la organización trató de formular nuevas estrategias a lo largo de la guerra: cuando el líder Yahya Sinwar fue asesinado por las FDI, Hamás fue dirigido por un consejo de liderazgo para no desarrollar la dependencia de una sola figura. A medida que su arsenal de cohetes se reducía, pasó a centrarse en la guerra de guerrillas y, si bien Israel pudo demostrar su capacidad para penetrar la inteligencia en medios electrónicos, el personal de la organización, tanto militar como civil, pasó a usar notas y mensajeros humanos.
Según las fuentes, Daalis fue uno de los que logró dirigir el gobierno de la Franja de Gaza incluso durante la guerra. Se aseguró de que se siguieran pagando los salarios de los empleados del gobierno y, como describió su jefe de gabinete, Ismail Thawabta: "Siguió trabajando durante toda la guerra, moviéndose en secreto entre instituciones para supervisar el trabajo".
Una fuente cercana a Daalis dijo a Reuters que a veces viaja en coche y a veces a pie para reunirse con la gente. Se comunicaba con sus colegas principalmente a través de notas. "Imagínense la dificultad de coordinar la distribución de los salarios y su transferencia a los trabajadores en las distintas áreas de la Franja de Gaza, cuando los tanques y los aviones de combate estaban operando en Gaza", agregó una fuente cercana a Hamás, sin revelar detalles sobre cómo se llevó a cabo la distribución.
Una nueva prueba de la afirmación de soberanía de Hamás en la Franja de Gaza llegó el viernes, con un informe de la unidad de seguridad de la organización de que un hombre de 48 años había sido ejecutado por presuntamente colaborar con el Shin Bet.
El periódico saudí Asharq Al-Awsat citó a fuentes de Hamás que señalaban que, así como el poder militar se ha recuperado, también se rehabilitará el gobierno civil a pesar de las pérdidas infligidas por los ataques de las FDI: "El movimiento tiene recursos humanos en los que confiar. Esto no es nuevo para las facciones palestinas, que durante décadas han sufrido golpes, pero están demostrando ser fuertes".
Recientemente, fuentes de Hamás han dicho en repetidas ocasiones que la organización aceptará renunciar al gobierno civil en la Franja de Gaza, pero no a las armas. Las fuentes repitieron el mensaje y dijeron al periódico: "Los líderes [de Hamás] no tienen más remedio que devolver la realidad de la Franja de Gaza a los días anteriores al 7 de octubre, para que puedan respirar aliviados. Después, transferirá el poder a la Autoridad Palestina o a un gobierno acordado por un acuerdo nacional palestino". Según las fuentes, Hamás tiene otras cartas además de los secuestrados, pero no especificaron cuáles.
Mitad y mitad en control militar
Los medios de comunicación mundiales que se ocuparon del tema también analizaron cómo Hamás podría luchar contra las FDI si se expandieran las operaciones terrestres. Hasta el momento, las FDI han entrado en la zona de Beit Lahiya y en el barrio de Shabura en Rafah, además de tomar el control de la mitad de la ruta de Netzarim. Antes de que entrara en vigor el alto el fuego, los terroristas llevaron a cabo una guerra de guerrillas –sin uniforme– y prepararon muchas escenas de artefactos explosivos improvisados. Una gran parte de los artefactos explosivos improvisados estaban compuestos por municiones y artefactos explosivos de las Fuerzas de Defensa de Israel sin detonar.
Desde el comienzo de la guerra, Hamas ha perdido a la mayoría de sus comandantes militares y, según fuentes de inteligencia que hablaron con el Wall Street Journal, el liderazgo militar en la Franja de Gaza está dividido y es desigual: en el sur y el centro de la Franja de Gaza, Muhammad Sinwar, el hermano de Yahya Sinwar, tiene el control, pero está huyendo de Israel y no se comunica mucho, según fuentes de inteligencia árabes citadas por el periódico. Mientras tanto, tampoco ha logrado imponer su autoridad sobre el norte de la Franja de Gaza, que, según el informe, está al menos controlado militarmente por el comandante de la Brigada de la Ciudad de Gaza de Hamas al comienzo de la guerra, Izz ad-Din Haddad.
El martes, Hamas disparó tres cohetes contra Tel Aviv, uno de los cuales fue interceptado. Ayer, se dispararon dos cohetes más contra Ashkelon, que también fueron interceptados. Fuentes de inteligencia dijeron al Wall Street Journal que incluso ahora, después del alto el fuego, Hamas se encuentra en una "economía armamentística" cuando se trata de cohetes de largo alcance.
Recientemente, la organización reclutó a miles de nuevos terroristas y, según fuentes de inteligencia árabes, distribuyó folletos que explicaban cómo usar armas y librar una guerra de guerrillas contra Israel. Uno de ellos detalla cómo atacar a los tanques Merkava y dónde se encuentran sus "puntos de muerte". Hamás explicó a los nuevos comandantes dónde ubicar a los terroristas en caso de una operación terrestre de Tzáhal.
Hasta ahora, hasta donde se sabe, no ha habido oposición de Hamas a las operaciones terrestres de las FDI, pero una fuente cercana a la organización dijo a Reuters: "Si las fuerzas israelíes profundizan, los combates serán inevitables y los soldados israelíes comenzarán a sufrir daños".
