El enviado de Estados Unidos para Oriente Medio, Amos Hochstein, dijo el martes que había mantenido "conversaciones muy constructivas" con el presidente del Parlamento libanés en Beirut y que había una "oportunidad real" para poner fin al conflicto entre el grupo armado Hezbolá, respaldado por Irán, e Israel.
Hochstein llegó a Beirut para reunirse con Berri, que representa a Hezbolá en las negociaciones, y con el primer ministro interino libanés, Najib Mukati.
"Este es un momento de toma de decisiones. Estoy aquí en Beirut para facilitar esa decisión, pero en última instancia es la decisión de las partes llegar a la conclusión de este conflicto. Ahora está a nuestro alcance", dijo a los periodistas después de la reunión.
Mientras Hochstein estaba de visita, Hezbolá lanzó un misil contra el centro de Israel, hiriendo a cinco personas mientras el fuego de cohetes hacia el norte continuó durante toda la mañana.
El periódico Al Akhbar, afiliado a Hezbolá, dijo en un informe el martes que la visita de Hochstein es el último intento de llegar a un acuerdo, pero que persisten obstáculos.
De acuerdo con el documento, los dos temas que deben resolverse son la "autodefensa" de Israel y la composición de la comisión internacional que supervisará el cumplimiento de los términos del acuerdo.
Líbano dice que la autodefensa ya está reconocida por el derecho internacional y, por lo tanto, no tiene por qué ser parte del acuerdo de alto el fuego, y que la insistencia de Israel en incluirla es un intento de legitimar cualquier acción militar futura que emprenda. Por lo tanto, el Líbano lo rechaza.
Beirut también se opone a la participación del Reino Unido y Alemania en la comisión internacional que supervisa el cumplimiento del acuerdo, pero las fuentes dijeron a la publicación que ese asunto podría resolverse más fácilmente.
El canal Al Hadath de Arabia Saudita, en su informe del martes, citó fuentes que dijeron que Estados Unidos quería que el Líbano aceptara la supervisión estadounidense del Aeropuerto Internacional de Beirut y los puertos marítimos, así como su supervisión de las fronteras para evitar la afluencia de armas para Hezbolá que llegan desde Siria.
Según el canal, Hochstein estaba negociando un acuerdo que abarcaría todo el Líbano y no sólo el sur.