Los esfuerzos egipcios para solidificar el alto el fuego alcanzado entre Israel y Hamas el mes pasado, después de 11 días de combates, se han topado con un obstáculo por el control del dinero, lo que amenaza con una nueva escalada de violencia.
El Cairo envió una delegación encabezada por el jefe de inteligencia Abbas Kamel para ayudar a mediar en una tregua a largo plazo e iniciar planes para la reconstrucción de Gaza. La delegación continuó desde Gaza hacia Israel y Cisjordania para reunirse con funcionarios israelíes y palestinos.
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El jefe de inteligencia de Egipto, Abbas Kamel, abraza al líder de Hamas en Gaza, Yahya Sinwar, durante una visita a la Franja para apuntalar el alto el fuego de mayo de 2021.
(AFP)
Los funcionarios palestinos estimaron el costo de la reconstrucción en más de 300 millones de dólares, y Estados Unidos prometió ayudar en la reconstrucción. Pero la imposibilidad de llegar a un acuerdo sobre quién controlará la ayuda financiera y quién supervisará la reconstrucción paralizó los esfuerzos de El Cairo.
El doctor Mukhaimer Abu Saada, jefe del Departamento de Ciencias Políticas de la Universidad Al-Azhar, en la ciudad de Gaza, dice que el alto el fuego "todavía es frágil y la situación es muy tensa".
“Los cruces entre la Franja de Gaza e Israel siguen cerrados en su mayor parte, excepto para la entrada de alimentos; no hay entrada de combustible ni de la subvención catarí ”, agregó.
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Un convoy de excavadoras egipcias llega al lado de Gaza del cruce fronterizo de Rafah entre Egipto y la Franja.
(AFP / Getty )
Con la aprobación de Israel, desde 2018 Catar ha entregado millones de dólares en efectivo a los gobernantes de Hamás de Gaza para pagar el combustible de la única planta de energía de la Franja y brindar ayuda a decenas de miles de familias afectadas por la pobreza.
Eli Nesan, analista político israelí y experto en el conflicto palestino-israelí, dice que Israel está tratando de contener a Hamás y evitar que expanda su arsenal.
“La razón para evitar que los materiales de construcción entren [en la Franja] es que Hamás usará estos materiales para reconstruir los túneles que fueron destruidos. En cuanto a dejar entrar el dinero [catarí], no tiene sentido que este dinero pase a través de Hamás, que toma una gran parte de él con el propósito de desarrollar y comprar misiles”, añadió.
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Los miembros del ala militar de Hamas muestran sus cohetes en un desfile de Gaza tras el conflicto de mayo con Israel.
(Ynet)
Nesan cree que los esfuerzos de Egipto para establecer un alto el fuego a largo plazo continúan, pero “de vez en cuando escuchamos amenazas de los líderes del movimiento Hamás que afectan negativamente estos esfuerzos. La Marcha de la Bandera [de los jóvenes nacionalistas, realizada el martes en Jerusalem] no daña el estatus de Haram al-Sharif [el Monte del Templo], pero Hamás quiere una excusa para la incitación".
Hamás llamó a la marcha el "detonador de una explosión para una nueva batalla para defender Jerusalem y la Mezquita Al-Aqsa". Sus funcionarios instaron a los palestinos a "movilizarse" en Al-Aqsa y la Ciudad Vieja de Jerusalem. La marcha transcurrió en gran parte de forma pacífica, con pocos incidentes y un puñado de detenciones.
Nesan dice que estas amenazas de Hamás no deben tolerarse. “Es inconcebible que Hamás dicte sus deseos y decisiones a Israel”, señala.
Abu Saada cree que Hamás puede recurrir a viejas tácticas para obligar a Israel a aceptar los esfuerzos de mediación egipcios, como su renovado lanzamiento de globos incendiarios desde Gaza hacia comunidades en el sur de Israel.
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Miembros de la Yihad Islámica preparan globos incendiarios para enviarlos a Israel desde Gaza, el 15 de junio de 2021.
(AFP)
“Es poco probable que aumente la escalada a pesar de la tensa situación; no creo que se desarrolle tanto y vuelva al punto de la confrontación armada ”, opina.
Hamás ha señalado que está abierto a negociaciones "indirectas y rápidas" con Israel sobre un intercambio de prisioneros, pero las dos partes ven diferentes caminos para llegar a ese elusivo acuerdo.
“El problema es que Israel quiere vincular el tema de la reconstrucción con el intercambio de prisioneros, y Hamás, por su parte, está decidido a separar este tema de la reconstrucción”, explica Abu Saada.
El estancamiento en las negociaciones es incómodo para los egipcios, a quienes Estados Unidos les encargó supervisar el proceso de estabilización de la tregua y también liderar los esfuerzos de reconstrucción.
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Una excavadora limpia los escombros en Gaza junto a una imagen del presidente egipcio Abdel-Fattah el Sisi, que ha prometido millones de dólares para reconstruir el enclave.
(EPA)
“Esto es vergonzoso para los egipcios. Por un lado, quieren establecer la 'calma' y, por otro lado, hay presión israelí sobre ellos para que endurezcan el cierre de Gaza. Egipto es ahora el que gestiona el tema de la remoción de escombros y es una parte esencial en el proceso de reconstrucción ”, señaló Abu Saada.
El presidente egipcio Abdel-Fattah el-Sisi prometió 500 millones de dólares para reconstruir la Franja de Gaza y mejorar significativamente la infraestructura después de que gran parte de ella quedara en ruinas por el lanzamiento de cohetes de Hamás y los devastadores ataques aéreos israelíes.
"Egipto es ahora el que gestiona el tema de la remoción de escombros y es una parte esencial en el proceso de reconstrucción”
Mukhaimer Abu Saada
Durante más de una década, el empobrecido enclave costero palestino ha estado sometido a un estricto bloqueo israelí que limita el paso de personas y mercancías, así como a restricciones similares impuestas por Egipto.
El presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, ha prometido que Washington trabajará con las Naciones Unidas en la entrega de ayuda humanitaria a la Franja de Gaza y de aydar en la reconstrucción, con medidas rigurosas para controlar los fondos que se utilizan para armar a Hamas, que la mayoría de los países de Occidente considera un grupo terrorista.
