"No disparamos si hay peligro de dañar a mujeres y niños, a menos que haya peligro inminente de dejar vivir a los terroristas", declaró un funcionario del Ministerio de Asuntos Exteriores en una sesión informativa tras la muerte de civiles en ataques israelíes al lanzar su operación "Escudo y Flecha".
"Este modo de operar está justificado por el derecho internacional", afirmó.
Pero los altos operativos de la Jihad Islámica se esconden entre los civiles, sabiendo que están en el punto de mira de las FDI, y dirigen sus cohetes contra la población civil al otro lado de la frontera. "Se trata de un crimen de guerra, simple y llanamente", manifestó el funcionario.
Israel lleva mucho tiempo afirmando que los terroristas de Gaza lanzan sus cohetes contra ciudades israelíes, desde zonas pobladas, buscando causar daño a los gazatíes para interrumpir los ataques israelíes. El funcionario del ministerio dijo, además, que la JIP se alegra cuando mujeres y niños resultan heridos y utilizan tales tragedias para justificar su violencia contra Israel, pero añade que el Estado judío tiene derecho a defenderse y está justificado en sus ataques según la ley.
La información llegó después de que los responsables de Salud palestinos dijeran que al menos 12 de las víctimas mortales en Gaza eran familiares, mujeres y niños. Según los palestinos, el ataque inicial fue una completa sorpresa y los altos cargos de las facciones se movían a plena vista.
Según el funcionario del ministerio, cuando están escondidos, es difícil localizarlos de forma quirúrgica sin daños colaterales.
