Hace dos décadas, parecía que se habían dado grandes pasos hacia la paz, cuando las FDI se retiraron de la Franja de Gaza y de partes de Cisjordania pobladas por palestinos. Los palestinos recibieron su legítimo derecho a manejar sus asuntos y practicaron su independencia.
Al principio, las tensiones en el conflicto árabe-israelí parecieron reducirse. Unos pocos terroristas todavía lanzaban ataques, pero Israel invirtió en defensas fronterizas, barreras y el sistema de defensa antimisiles.
Pensábamos que una nueva generación se liberaría de la ocupación militar y aceptaría la solución de dos Estados, los israelíes regresarían a sus fronteras legales y lograrían la seguridad que siempre anhelaban, mientras los palestinos prosperaban.
En cambio, la Autoridad Palestina y Hamás criaron a sus hijos con la mentalidad de negar cualquier derecho de los judíos a vivir a su lado. Incluso en la cobertura informativa del conflicto árabe-israelí, se omitieron hechos cruciales y se tergiversaron para que el lector creyera que la parte israelí estaba completamente equivocada.
Las entrevistas con jóvenes palestinos de hoy revelan una opinión uniforme que ignora la compleja verdad y reconoce una sola justicia: expulsar a todos los judíos “del río al mar”. Desafortunadamente, también los propalestinos en el mundo llaman a liberar a Palestina sin tener una idea de lo que eso significa.
Simplemente pediría a los partidarios de una “Palestina libre” que expliquen qué es exactamente lo que piden. Los jóvenes palestinos no sólo piden las tierras privadas de sus abuelos; quieren toda la tierra, con gente que ya vive allí legalmente, exactamente como los estadounidenses en Estados Unidos.
Las personas que apoyan esta causa deberían considerar su responsabilidad ante un posible futuro cercano en el que los judíos serían expulsados de sus hogares, asesinados o exiliados a Estados Unidos, Europa y Asia. Los judíos se convertirían en refugiados como lo han sido en numerosas ocasiones a lo largo de la historia. Quienes están a favor de esto se enterarán demasiado tarde de que no se restablecerá la justicia para nadie en esta tierra.
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El primer primer ministro de Israel, David Ben Gurion, firma la Declaración de Independencia.
(GPO)
El dolor de los refugiados palestinos es evidente. El trauma del exilio genera enormes olas de destrucción e injusticia. Permítanme demostrar lo que quiero decir con una pequeña historia familiar. Mi abuelo era un estudiante polaco en la Universidad de la Sorbona cuando estalló la Segunda Guerra Mundial. Fue reclutado por el ejército polaco, que fue rápidamente derrotado por los nazis. Escapó con su esposa a Uzbekistán, justo antes de que capturaran y mataran a toda su familia.
Fueron refugiados durante casi 10 años sin ningún lugar donde alojarse de forma segura. Emigraron a Israel y al principio vivieron en tiendas de campaña. Creo que el cuadro de mi abuela Salka que aparece a continuación explica lo que realmente significa ser un refugiado. La familia se mudó de las tiendas de campaña a una casa árabe desierta en Ramla y, finalmente, siguió adelante con su vida y se instaló en un apartamento propio.
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Un refugiado 1939, ilutración de Salka Seifer, quien tuvo que vivir junto a su esposo como refuigada durante casi 10 años.
Muchos árabes huyeron de Ramla después de la guerra de 1948, a pesar de que el liderazgo israelí permitió que permanecieran aquellos que no participaron en la lucha contra el Estado recién establecido. Sólo a una pequeña parte de los que huyeron se les permitió regresar. Hoy Ramla está poblada principalmente por árabes que son ciudadanos de Israel, parte de los 2,1 millones de miembros del sector árabe de Israel que viven en coexistencia con la población judía.
Saben muy bien que no se salvarán de aquellos que llaman a la yihad y a “liberar Palestina”. Significaría perder sus propiedades y perder los derechos de las mujeres árabes y también de los cristianos. Las granjas y casas privadas siempre estuvieron en posesión de judíos y otros pueblos de esta tierra, pero la autoridad gobernante cambió de manos entre el reino de Judea-Israel, los romanos, los cruzados, los otomanos, los británicos y los israelíes.
Bajo todas las autoridades, los judíos en la mayoría de los casos se establecieron legalmente. Vivo en un pueblo llamado Mazkeret Batya. El nombre recuerda a la madre de Edmond de Rothschild, que compró este terreno en 1883 a un pueblo árabe cercano. En aquel entonces y durante muchos años, los judíos respetaban a los árabes locales y los árabes vivían en buena vecindad con los judíos.
Sin embargo, algunos líderes de grupos árabes difunden odio y falsos rumores para dañar la confianza entre nuestro pueblo. Los disturbios de agosto de 1929, en los que fueron asesinados 133 judíos desarmados, fueron organizados por Amin al-Husseini como parte de su competencia con otro líder musulmán. Hoy en día se produce una incitación similar por la misma razón por parte de otros líderes árabes.
Algunos líderes de grupos árabes difunden odio y falsos rumores para dañar la confianza entre nuestro pueblo.
Nuestra Declaración de Independencia, que apreciamos, fue escrita justo antes de la guerra de 1948 y dice que Israel garantizará la igualdad total independientemente de la religión, la raza o el sexo. La guerra de 1948 nos la infligieron los países árabes unidos y las aldeas árabes hostiles y terminó en la Nakba palestina.
El 57% de la población árabe abandonó el país, apremiada por falsas advertencias de sus propias emisoras de radio árabes de que debían escapar. Los judíos sufrieron humillaciones, pogromos y conversiones forzadas en los países árabes y alrededor de 650.000 de ellos emigraron a Israel, la mayoría después de su establecimiento.
La mayoría de los judíos en los países árabes fueron esencialmente exiliados dejando atrás todas sus propiedades. Mi madre vino de Túnez después de que los nazis confiscaran la fábrica de cuero de su familia y después de sufrir agresiones y trabajos forzados. Los propalestinos nos insultan al llamar a Israel “un estado de apartheid colonialista blanco” sin siquiera molestarse en conocer la verdad.
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Los residentes de Gaza se desplazan hacia el sur a través de corredores humanitarios.
(AP)
Los israelíes son mixtos en origen y color de piel, pero todos tienen los mismos derechos, incluidos musulmanes y cristianos. Los judíos que emigraron a Israel eran los que tenían vidas más miserables, los refugiados , padecían una vida dura y muchas amenazas, pero soñaban con Jerusalem. Hace un siglo, nuestra culpa era no ser arios, hoy nuestra culpa es ser de piel blanca, sea lo que sea que funcione para la agenda antisemita.
Hace un siglo, nuestra culpa era no ser arios, hoy nuestra culpa es ser de piel blanca, sea lo que sea que funcione para la agenda antisemita.
No apoyo a los colonos judíos que viven provocativamente en territorios controvertidos. Algunos de ellos dicen que es inaceptable abandonar la tierra de nuestros antepasados. Sólo una pequeña minoría comete crímenes de odio, que aparecen en los titulares de las noticias. En verdad, nosotros los israelíes simplemente buscamos un hogar seguro. Una vez, mis padres se mudaron (sin mí) para construir la casa asequible de sus sueños en un asentamiento en el norte de Gaza, cerca de la frontera.
Sin embargo, en 2005 su ciudad, Nitzanit, fue evacuada de manera forzosa por las Fuerzas de Defensa de Israel. Este acto del gobierno israelí tenía una intención: permitir que los habitantes de Gaza y los israelíes vivieran pacíficamente a ambos lados de la frontera. No puedes imaginar lo devastados que quedaron mis padres después de la evacuación.
Hoy viven en Ashkelon y sufren los continuos bombardeos de miles de cohetes desde Gaza. Mis padres nunca atacaron a nadie y nunca pretendieron servir a Dios; sólo buscaban oportunidades. Ahora están a punto de convertirse en refugiados por tercera vez en sus vidas. Gaza quedó completamente liberada de nuestra presencia militar, excepto en los momentos de enfrentamientos, y todavía los antiisraelíes repiten su mantra de que se nos culpa de la ocupación.
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Nada justifica los bárbaros ataques a comunidades como el Kibbutz Be'eri
(Tal Shahar)
¿Puedes entender cómo estos acontecimientos moldean la opinión pública israelí? Pido disculpas por los niños que murieron en Gaza durante la guerra, y esto debe evitarse a toda costa. Lo que Hamás hizo a nuestros bebés y familias el 7 de octubre tiene un nivel de crueldad completamente diferente y fue deliberado. Siento lástima por cualquier familia que pierde a sus seres queridos, y ustedes también deberían sentir compasión por las familias israelíes. ¿Cómo puede alguien justificar la mutilación de bebés o su utilización como rehenes?
Los líderes de Hamás habrían sido considerados criminales en cualquier sociedad sana, y lamentablemente hay más de ellos en prisiones israelíes. El mundo no debería permitir la liberación de terroristas peligrosos y aceptar sus métodos. Incluso los habitantes de Gaza son reprimidos cruelmente por estos grupos fanáticos, que exterminan a su oposición política, almacenan armas en las camas de los niños y luchan deliberadamente en presencia de niños, siendo así responsables de sus muertes injustificadas.
Sin embargo, después de ver la opinión fanática de muchos jóvenes palestinos, ya no puedo creer que el problema esté contenido dentro de un determinado grupo fanático. Se abusó de la autonomía que recibieron los palestinos, creando un monstruo de falsa educación para toda una generación. Este lavado de cerebro extremo combinado con una falsa difamación y demonización de Israel podría terminar en un desastre para todos.
La locura de las multitudes es tan profunda que se recita al peor terrorista de todos los tiempos, Osama Bin Laden, por considerar la existencia de Israel como el peor crimen de la historia, y algunos estadounidenses lo aceptan. Los jóvenes inocentes se convierten en turbas enfurecidas por la incitación en sus escuelas y por los medios de comunicación y las redes sociales irresponsables. El mundo occidental y los países árabes moderados deben poner fin a esta práctica de abusar de los niños con una educación falsa para lograr objetivos políticos.
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Osama Bin Laden (izquierda) recupera una popularidad irrazonable entre los círculos de extrema izquierda
(Getty Images)
También vemos a la UNRWA (Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Medio) participar en la educación sobre el odio y a los representantes de la ONU adoptar dobles estándares y utilizar términos como "genocidio" para describir a las víctimas injustificadas de la guerra. Como israelíes, nos resistimos a ignorar la malvada marcha de la multitud contra nosotros.
Reconozco que también merecemos críticas, pero no hay esperanza de resolver los problemas con una nueva generación que niega la compleja verdad y elige odiarnos basándose en una realidad alternativa. Llego a la conclusión de que una solución de dos Estados sólo es posible si esos Estados son Israel y Jordania en las fronteras anteriores a 1967.
Como israelíes, nos resistimos a ignorar la malvada marcha de la multitud contra nosotros.
Las turbas árabes que viven en Gaza y Cisjordania no son capaces de establecer un Estado civilizado en un futuro próximo. Todo el concepto de “palestinos” es un completo disparate, y es por eso que el concepto ha fracasado. El pueblo que se autodenomina palestino no tiene herencia de ningún tipo, ni grandes figuras históricas (excluyendo a un terrorista despreciado que de alguna manera ganó un premio Nobel, y su sucesor que niega el Holocausto), ni un origen común, ni objetivos decentes, ni una singularidad que exija separación del estado de Jordania.
Tampoco tienen base para utilizar el nombre romano del antiguo Israel como propio. Por esta razón, todo informe histórico en nombre de los palestinos está tergiversado en un intento de reescribir la historia. Las personas de mentalidad independiente no deberían caer en su falsa narrativa, que ya niega los bárbaros ataques contra Israel.