El informe del comité parlamentario británico sobre la masacre en las comunidades fronterizas, también conocido como el "Informe Roberts", no es sólo un documento, sino también una protesta. Es la evidencia de que el mundo no podrá decir "no sabíamos". Es la respuesta a todas esas fuerzas que están trabajando para ignorar y negar.
Se trata de un informe oficial compilado por parlamentarios y lores del Reino Unido, con el objetivo de investigar y documentar las atrocidades cometidas el 7 de octubre. El propósito de la comisión era recopilar y analizar pruebas, proporcionar documentos basados en pruebas y lograr la revelación de la verdad en el ámbito internacional. El informe documenta el ataque con gran detalle, basándose en testimonios de sobrevivientes, imágenes fotográficas, opiniones de expertos e informes oficiales. Lleva el nombre de Lord Andrew Roberts, profesor de historia, que encabezó la comisión.
El informe describe los acontecimientos durante la campaña terrorista de Hamás, en los que fueron asesinadas 1.182 personas, entre ellas 18 ciudadanos británicos, siendo el más joven un bebé de 14 horas de nacido. También hace hincapié en la necesidad de una documentación precisa de los acontecimientos para combatir la negación de la masacre y la distorsión de la historia. Describe las atrocidades que se cometieron, incluidos asesinatos, violaciones, secuestros y torturas, y señala que ésta es "la mayor masacre del pueblo judío desde el Holocausto".
La historia la escriben no sólo los acontecimientos en sí, sino también aquellos que eligen documentarlos. La verdad debe ser escuchada, especialmente cuando está presente frente a los intentos deliberados de oscurecerla. La memoria del Holocausto nos enseña que la negación de los crímenes se produce rápidamente y, a veces, en tiempo real. En el caso de los acontecimientos del 7 de octubre, la negación de las atrocidades tuvo lugar a las pocas horas.
Escudo defensivo
Por lo tanto, la documentación confiable, exhaustiva y objetiva es fundamental para garantizar que el mundo recuerde y no niegue la verdad. Por lo tanto, este documento no es solo un documento. Es nuestro muro defensivo contra los intentos de negación.
Como alguien que documenta la violencia sexual que tuvo lugar ese día y la lucha por el reconocimiento internacional de estos crímenes, veo con mis propios ojos testimonios fotográficos, me reúno con las víctimas, recojo cada pieza del "rompecabezas" para entender lo que sucedió ese día y actuar para documentarlo. Contra la labor de nuestros incansables esfuerzos, actúan muchas fuerzas internacionales, fuertes y bien presupuestadas. Entonces, de repente, se revela que los hechos se reescriben y la verdad se borra. Por ejemplo, esto se hace en Wikipedia, en la que confían miles de millones de personas en todo el mundo para encontrar información fiable. Una mano anónima reescribe lo sucedido y crea una narrativa distorsionada.
Las mentiras no vienen en forma de negación total, sino más bien a través de "preguntas", "dudas" o intentos de presentar "dos lados". Para borrar un crimen, no es necesario cambiar los hechos. Todo lo que se necesita es plantear una discusión interminable sobre "lo que realmente sucedió".
Así es como se reescribe la historia. Esto hace que las víctimas desaparezcan de la conciencia pública, y cuando esto sucede el camino hacia el próximo crimen ya está allanado porque el agresor gana legitimidad y simpatía. Un mundo al revés.
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Terroristas de Hamás durante la masacre del 7 de octubre. No hace falta falsear hechos, sino tan sólo plantear "preguntas" o "dudas" para empezar a negar.
(Ynet)
Acusación
Por lo tanto, el informe británico ya no es documentación seca. Es una acusación. Es una declaración indiscutible de lo que sucedió el 7 de octubre: la violencia sin precedentes, la masacre, las ejecuciones públicas, los secuestros, la violación y el uso de mujeres como armas de guerra. Se basa en testimonios, en materiales fotográficos, en hallazgos legales.
El Informe Roberts es un mensaje para todas las víctimas y sus familias: los escuchamos. El mundo está escuchando tu situación. Sirve de base para enjuiciar a los autores de crímenes, aumentar la presión internacional y crear cambios en las políticas para proteger a las poblaciones civiles en futuros conflictos.
La historia juzgará a aquellos que eligieron ignorar, silenciar y negar. El informe de la comisión parlamentaria británica es más que un documento: es nuestro muro defensivo contra los intentos de ocultarlo, prueba de que se seguirá haciendo justicia. Es la voz de las víctimas, un testimonio vivo de lo sucedido y un llamado a toda persona moral a actuar, para que este horror no regrese.
(*) Especialista en la promoción de la igualdad de género y la lucha contra la violencia de género, ex Directora General de la Autoridad para el Adelanto de la Condición Jurídica y Social de la Mujer
