La Turquía de 2025 ya no pide un "lugar en la mesa" de Oriente Medio, planea construir toda la mesa. Los informes sobre la inminente firma de una alianza de defensa turco-siria en la que se establecerán bases en el corazón de Siria exigen que Israel tome medidas militares y políticas para persuadir a Erdogan de que recalcule su rumbo. Un fracaso israelí para dar forma a la arena del norte convierte una guerra de poder entre Israel y Turquía en una amenaza real, mucho más peligrosa que Irán.
Turquía no es Irán, ni en aislamiento, ni en la economía, ni en la calidad de su influencia. Es una potencia regional dinámica, que aspira, con un pie en Occidente, a enormes palancas sobre Europa y un dedo en el pulso de Oriente. El derrocamiento de Assad y la toma de control del territorio sirio fueron cuidadosamente planeados en Ankara. El éxito de Al-Golani y el reconocimiento internacional que se está formando a su alrededor han permitido a Turquía establecer zonas de amortiguamiento, expulsando a sus rivales Irán y Rusia, y ahora Erdogan viene a pagar el cheque y recibir los cambios políticos y estratégicos. La victoria decisiva de Israel sobre la media luna chiíta da paso a un movimiento bien pensado por parte de Turquía para apropiarse del Mediterráneo oriental.
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El derrocamiento de Al-Assad y el ascenso de Al-Golani fueron cuidadosamente planeados en Ankara.
(Abdulaziz Ketaz, AFP)
El estratega que navega por las ambiciones geopolíticas de Turquía
De cara a las fatídicas elecciones nacionales, parece que Turquía en su conjunto se encuentra estirada sobre un eje de decisión política. Cualquiera que mire sólo hacia adentro, se pierde la verdadera historia. Detrás de las escenas de la arena política, se destaca un actor clave: Hakan Fidan, ex ministro de Relaciones Exteriores y jefe de inteligencia. Fidan no es sólo un diplomático, es el estratega que dirige las ambiciones geopolíticas de Turquía: fortalecer la influencia en Libia, redes militares en Siria, presencia naval en el Mediterráneo y un diálogo dual con Rusia, por un lado, y la OTAN, por el otro. Más que Erdogan, es el cerebro detrás del proyecto de hegemonía turca.
El estatus del ejército turco ya no es una visión de futuro. El segundo ejército más grande de la alianza de la OTAN con un despliegue estratégico entre Rusia y Oriente Medio ya ha establecido una realidad económica y geopolítica: las exportaciones militares de Estambul ascienden ahora a más de 7.000 millones de dólares, cuadruplicándose en una década. El 70% de los equipos militares se producen en el país, lo que lo convierte en el cuarto mayor fabricante de drones del mundo. Y sus grúas más importantes no son militares en absoluto, ya que los gasoductos de gas natural que atraviesan su suelo lo convierten en una fuente energética clave para Europa, con más de 3,5 millones de sirios en su territorio con la Unión Europea en sus manos.
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Erdogan con el presidente ruso, Vladimir Putin.
(Alexander Zemlianichenko / POOL / AFP)
Israel debe iniciar un movimiento formativo para evitar una guerra entre Israel y Turquía. Tenemos dos alianzas posibles para tal movimiento: un grupo de Oriente Medio es la alianza sunita moderada, la de Egipto, los Emiratos Árabes Unidos y Arabia Saudita bajo los auspicios de la Casa Blanca. Al mismo tiempo, sin embargo, desde Occidente hay otra alianza en la que Israel ha sido un actor importante en los últimos años: la que incluye a Grecia y Chipre. Esta alianza ya incluye cooperación militar, energética, civil (por ejemplo, vuelos de extinción de incendios) y diplomática. También marca las fronteras de un sector para Turquía, que ve la isla chipriota como un patio trasero. Si Israel tiene herramientas importantes para hacer frente a Turquía, sus aliados en el Mediterráneo no las tienen.
La discusión de seguridad que Netanyahu convocó sobre el tema es un momento de prueba definitoria para Jerusalem: si será capaz de identificar la arena emergente y usar todas sus palancas de poder, no sólo militar, sino también económica, política y tecnológica, con un objetivo: identificar áreas de interés común con Turquía y usar las palancas que la dirigirán a estas áreas y no a un camino de confrontación con Israel.
First published: 15:49, 29.03.25