En todo el mundo, el fútbol femenino se ha convertido en lo más popular de los últimos años. La Copa del Mundo, que recientemente se cerró en Australia y Nueva Zelanda –y que ganó España–, rompió récords de vistas y calificaciones nunca antes vistos. Y ahora volvamos a nosotros, al Levante. En marcado contraste con lo que está sucediendo en toda Europa, en Israel el fútbol femenino todavía está muy lejos de la corriente principal, un episodio que todos esperan que no sea fugaz.
Un buen ejemplo de esto se encuentra en Jerusalem. El equipo masculino de Beitar Jerusalem es uno de los más famosos y populares de Israel. Pero, ¿su equivalente femenino? Pocas personas saben que existe. Se restableció hace sólo un año –debido a la decisión de la FIFA de que cualquier equipo masculino que quiera jugar en una competición europea también debe tener un equipo femenino– y está tratando de abrirse en condiciones difíciles.
La serie de Ynet Original "Beitarist" sigue al equipo de Jerusalem que juega en la Liga Nacional y sueña con llegar lejos. En el primer capítulo, se presenta la historia del grupo. Israel Kedmi, una interesante combinación de abogado, instructor de conducción y entrenador de fútbol, asumió a cargo del proyecto; Noa Avraham, una de los fundadores del club y jugadora del grupo; Ariel Hochberg, un neurocientífico que llega al Beitar desde Nueva Zelanda y afirma que "todo se trata de cultura. Israel todavía tiene un largo camino por recorrer hacia lo que vemos en el mundo". Kedmi es optimista y sabe que el fútbol femenino se popularizará en Israel: "Una mujer puede hacer cualquier cosa. Si puede volar un avión, entonces no hay razón para que no juegue al fútbol", sintetizó.