La verdadera singularidad de la próxima temporada de la Liga de Campeones de la UEFA -mas conocida como 'Champions- es el número de jugadores israelíes que tienen su lugar asegurado.
Nunca antes el fútbol israelí había sido testigos de un escenario en el que cuatro compatriotas jugaran para cuatro equipos diferentes en la fase de grupos en la misma temporada, así como un entrenador.
Estos son los israelíes cuyo talento se exhibirá en la temporada 23-24'.
Omri Glazer
Barak Bakhar, nuevo entrenador del reconquistado campeón serbio, el Estrella Roja de Belgrado, hizo un movimiento de poder y liberó a la querida leyenda local y portero de la selección nacional canadiense Milan Borjan. El técnico, de origen israelí, tenía en mente a un sustituto concreto: Omri Glazer, que también jugó a sus órdenes en su anterior equipo, el Maccabi Haifa F.C.
En los medios de comunicación locales y entre los aficionados, las habilidades futbolísticas y la confianza en sí mismo de Glazer son muy apreciadas y, naturalmente, serán evaluadas de forma diferente una vez que comiencen los partidos europeos. Se espera que cambien muchos aspectos, con un énfasis significativamente mayor en la defensa y en la importancia de la estabilidad de Glazer dentro del juego, partido a partido.
Oscar Gloukh
Oscar Gloukh está llamado a ser el jugador israelí con mayores expectativas en la Liga de Campeones de esta temporada. Lo que se espera es una fusión dinámica de las esperanzas del Red Bull Salzburgo y el sentimiento del público local, que ve a Gloukh como una especie de salvador, junto a leyendas israelíes de la talla de Eyal Berkovich y Yossi Benayoun. No es seguro que pueda colmar de inmediato las aspiraciones de todos. Aunque el israelí posee un talento fuera de lo común en una escala que no se había visto antes en Israel, también es un joven de 19 años que aún no experimentó el fútbol europeo al más alto nivel.
Además, el hecho de que el Salzburgo haya cambiado de entrenador en el último momento -Gerhard Struber fue nombrado hace una semana para sustituir a Matthias Jaissle, que se marchó sorprendentemente al Al-Ahli de Arabia Saudita- no es lo ideal a corto plazo, dado que Gloukh ya había conseguido impresionar al anterior técnico y ahora empieza de nuevo como un jugador joven que necesita demostrar su valía.
La sensación es que tendrá que pasar rápidamente a otro nivel.
Liel Abada
Mientras Gloukh se encuentra en una posición incómoda con un nuevo entrenador, Liel Abda se alegra del cambio en el Celtic, equipo campeón de Escocia. Hubo informes que hablaban de un distanciamiento entre él y el entrenador Ange Postecoglou, ya que el portugués Diogo Jota solía tener prioridad sobre el israelí. Se suponía que las condiciones estaban maduras para el traspaso de Abada a la Premier League inglesa, y el Southampton era un nombre candente. Pero en verano, Postecoglou se marchó al Tottenham Hotspur (sustituido por Brendan Rodgers), Jota fue vendido por 30 millones de euros al Al-Ittihad de Arabia Saudita (que ya quiere deshacerse de él), y el Southampton se prepara para la segunda división. En el partido inaugural en Escocia, Abada se mostró prometedor durante sus 79 minutos sobre el terreno de juego, dando una asistencia antes de abandonar por una lesión menor.
Tiene más experiencia y demostró su valía en comparación con otras opciones en la banda derecha, y si consigue mantenerse sano con el tiempo, no hay razón para que ésta no sea una temporada excelente para él.
Sin embargo, también está la cuestión del Celtic en la Liga de Campeones. Cuando llega a la fase de grupos -no siempre es una garantía, ya que tiene que superar eliminatorias-, suele encajar varios goles y no marca tanto. Abada tiene muchas posibilidades de ser titular, pero no será especialmente fácil, sobre todo cuando suene el silbato.
Stav Lemkin
La situación de Stav Lemkin, fichado por el Shakhtar Donetsk ucraniano, no es algo a lo que estemos acostumbrados en el fútbol israelí: dos exitosos torneos juveniles de la selección nacional en un solo verano, en los que un central se erige como jugador más destacado; un defensa que a los 20 años se incorpora a un prestigioso club de la Liga de Campeones y una tremenda esperanza para la selección nacional de alguien que no es centrocampista ofensivo ni extremo.
Lemkin estuvo excepcional este verano, pero es crucial recordar que, en la temporada anterior, cuando jugó con regularidad en el Hapoel de Tel Aviv, no llegó a impresionar. Se encuentra en una situación extremadamente delicada, ya que necesita un rendimiento constante a lo largo del tiempo en el equipo absoluto.