Arugambay es un pueblo ubicado a tres kilómetros de Pottuvil en Sri Lanka. Es un paraíso de olas, donde miles de turistas llegan durante la temporada –de mayo a septiembre– para disfrutar de este deporte en el Océano Índico.
En los últimos años la mayoría de los turistas son jóvenes israelíes que llegan directo desde el aeropuerto en taxi hasta Arugambay. Los negocios locales se amoldaron a los turistas israelíes y ofrecen productos en hebreo, se escucha el idioma en cada esquina de Arugambay, muchos lo denominan como el mini Israel de Sri Lanka, por la gran cantidad de jóvenes que llegan desde Medio Oriente. Hay muchas fiestas, un ambiente joven y muchos viajeros israelíes que viajan para quedarse desde semanas hasta incluso meses.
La paradoja es que la mayoría de la población es musulmana observante y están felices de recibir a los israelíes, que generan la mayor parte del ingreso de turismo. Y hasta hay una comunidad judía de Jabad Lubavich consolidada en el pueblo que festeja encuentros previos al Shabbat y en las fiestas reúnen en la temporada alta más de doscientas personas que asisten al lugar.
Arugambay, como se dijo, es un pueblo conocido por el surf. Nuestra recomendación es que para empezar a surfear es necesario tomar unas clases que explican sobre la seguridad, lecciones básicas sobre manejo de la tabla y movimientos imprescindibles. Recomendamos a Kanan porque es un maestro certificado y tiene mucho conocimiento. Personalmente tomé dos clases con él y considero que para aprender necesitas una semana como mínimo.
Los periodistas de Ecoturismo Mundo nos alojamos en un hotel muy pintoresco con cabañas privadas al lado de la playa central en Beach View Hotel. Cada habitación tiene privacidad y mucho entorno natural, alrededor de cada una hay mucha vegetación y en el centro una pequeña piscina con tortugas de agua dulce. El servicio incluye un desayuno y en los próximos meses abrirán un restaurante. Además, alquilan tablas de surf y dan clases. La estadía fue confortable porque las habitaciones poseen aire acondicionado y mucho espacio externo.
Para relajarme disfruté de la playa central que parece una laguna porque no tiene olas y también de un masaje de una hora en un centro profesional ayurveda donde también me dieron una dieta para seguir.
Por la tarde hice un tour en una laguna a 4 kilómetros de Arugambay, se puede llegar en Tuk Tuk –transporte local- y pagar la entrada directamente allí. Estuvimos cerca de los elefantes, cocodrilos, aves y búfalos. El sitio es un paraíso ideal para un documental de naturaleza, un paseo imprescindible.
Ecoturismo Mundo
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First published: 13:04, 17.08.23
