El estadio Bloomfield de Tel Aviv se llenó de fanáticos de fútbol que tuvieron el gusto de ver una exhibición de primer nivel: el Paris Saint Germain (PSG), con todas sus estrellas, goleó 4-0 al Nantes y se consagró campeón de la Supercopa de Francia.
La Supercopa se pone en juego cada año entre los dos campeones de la temporada francesa: el ganador de la liga y el de la Copa de Francia. Por segunda vez consecutiva se disputó en Israel, ya que en la edición pasada se enfrentaron el PSG y Lille. En aquella oportunidad el PSG no jugó con sus principales figuras y cayó derrotado por 1-0. Pero este domingo estuvieron todos, a excepción de la estrella francesa Kylian Mbappé, ausente por una suspensión.
En el primer tiempo el argentino Lionel Messi abrió el marcador con una gambeta que descolocó al arquero y el brasileño Neymar deslumbró con un tiro libre que estableció el 2-0 antes del entretiempo. Las expectativas del público ya estaban cubiertas, pero en la segunda parte hubo más: el español Sergio Ramos convirtió un gol de taco y Neymar, una vez más, coronó la goleada con un penal que ejecutó con sutileza.
Esta copa oficial se suma a un par de partidos amistosos que nutren de fútbol europeo de primer nivel a la agenda del verano israelí. El sábado pasado la Roma de Italia venció 1-0 al Tottenham de Inglaterra, y el próximo domingo el estadio Bloomfield albergará el partido entre el Atlético de Madrid y la Juventus italiana.