El célebre escritor, poeta y activista Yehonatan Geffen falleció este miércoles a la edad de 76 años, según informó su familia.
Geffen fue un icono cultural y un querido narrador cuyas letras forjaron la infancia de los israelíes durante décadas.
Nunca tímido a la hora de expresar sus opiniones sobre temas de actualidad, también fue columnista y un duro crítico de la derecha israelí y de la presencia israelí en Cisjordania. Su última columna, publicada en marzo, iba dirigida al ex primer ministro Yair Lapid, amigo personal suyo desde hace tiempo.
Escribió que, aunque ambos tenían un acuerdo para abstenerse a hablar de política, ahora debe pedir a Lapid que "luche como un demonio" para detener los esfuerzos del primer ministro Benjamin Netanyahu por "debilitar a la Corte Suprema" y "herir de muerte a la democracia israelí".
En la carta, también aseguró: "[La esposa de Lapid] Lihi y yo te llamamos el 'fuerte', y así eres. No seas primer ministro, pero sé duro, incluso violento. Te enseñaré que está bien odiar a quienes desean para mí y mis amigos la muerte de nuestros hijos o el cáncer", escribió. Luego, firmaba su columna afirmando con confianza que "la democracia y la justicia prevalecerán al final".
"Geffen fue uno de los más grandes escritores israelíes", declaró Shlomo Artzi, otra figura emblemática de la música israelí. "Era agudo, eficaz y valiente, y crió a una generación de escritores que le siguieron", agregó.
"Lamento la noticia del fallecimiento del poeta y escritor Yehonatan Geffen", declaró en un comunicado la ministra de Cultura, Miki Zohar.
"Escribió historias y canciones que nos acompañarán eternamente y reverberarán en la identidad israelí", sostuvo.
Geffen comenzó su carrera de escritor con una novela que describía su infancia en la comunidad agrícola de Nahalal, donde también vivía su tío, el famoso general y político israelí Moshe Dayan.
Entre sus numerosas obras se cuentan también libros infantiles. Entre ellos destaca HaKeves HaShisha Asar (El decimosexto cordero), al que puso música y se convirtió en un exitoso espectáculo escénico que hoy forma parte del canon de la cultura israelí.
Su aguda percepción de la condición humana, el mundo de los niños y la corrupción del poder, junto con la sensibilidad y el humor, siempre destacaron en sus obras.
Años después de ser licenciado del servicio militar, Geffen, que fue paracaidista en las FDI y volvió al servicio activo durante la Guerra del Yom Kippur de 1973, habló abiertamente de los efectos que tuvo en él, especialmente cuando la noción de TEPT no era reconocida ni tratada por los militares.
Estudió en Cambridge y regresó a Israel sólo cuando murió su hermana. Su madre se había suicidado años antes.
Aviv, hijo de Geffen y estrella del rock y poeta con su propio nombre, dijo que aunque ambos habían tenido una relación tumultuosa durante muchos años, su padre era su héroe, quien le enseñó el amor a la lengua hebrea y a la patria. "Era un verdadero patriota", afirmó.