La aldea drusa de Kisra-Sumei estuvo de luto en la mañana de este lunes por el joven de 19 años, Yezen Falah, que fue asesinado en el ataque terrorista perpetrado en Hadera durante el domingo.
La familia del joven policía esta conformada por sus padres y dos hermanas, una de ellas su gemela.
La familia de Falah es muy conocida en el pueblo, muchos de ellos también sirvieron en las fuerzas de seguridad israelíes. Yezen siguió los pasos de su tío y se alistó en la Policía de Fronteras hace un año, tras insistir en tener un servicio significativo.
Louis Falah, tío de Yezen, aseguró a Ynet que su sobrino no se sentía bien a principios de la semana, pero quiso ir a la base a pesar de la insistencia de su madre para que se quedara en casa y descansara.
El domingo por la noche, la familia se reunió en casa de su abuela para ver las emisiones en directo desde Hadera.
"Sentía que pertenecía a la Policía de Fronteras y estaba orgulloso de su servicio"
Amal Falah, tío del agente asesinado en Hadera
El padre de Yezen, miembro de la autoridad penitenciaria de Israel, recordó que su hijo le informó de que la unidad tenía previsto parar a comer.
"Conozco a las Fuerzas de Defensa de Israel como oficial veterano. Sé que todos los soldados -en el Norte o en el Sur- están en peligro", expuso Louis, "pero cuando una persona que se sienta con sus amigos a comer y no está preparada para la confrontación, recibe un disparo en un acto sanguinario, no es fácil de aceptar", agregó.
Amal, otro tío, manifestó que el chico podría haber elegido servir en un papel menor, sin embargo, Yezen insistió en alistarse en una agencia de combate.
"Sentía que pertenecía a la Policía de Fronteras y estaba orgulloso de su servicio", aseveró.
"La mayoría de los hombres de la familia son policías fronterizos y él quería seguir su camino. Sus padres planearon un futuro brillante para él, pero la fe quiso otra cosa y le quitaron la vida. Es una tragedia", sumó.
"Es un atentado pecaminoso, no podemos dejar que el terrorismo levante la cabeza"
Mufaq Tarif, líder de la comunidad drusa de Israel
Yezen, según su familia, nunca hizo daño a nadie y su muerte se considera una gran pérdida para el pueblo: "Es una tragedia muy dolorosa, el pueblo perdió una flor", agregó un conocido.
Yasser Gadban, presidente del consejo local de Kisra-Sumai, habló también del joven agente.
"Cualquiera que estuviera con él sabía que su sonrisa era contagiosa. Era inteligente, humilde y con talento... es una tragedia que cayó sobre el pueblo, sobre la comunidad drusa y sobre todo el país", dijo.
El líder de la comunidad drusa de Israel, el jeque Mufaq Tarif, también hizo una declaración en respuesta al atentado.
"Es un atentado pecaminoso, no podemos dejar que el terrorismo levante la cabeza. Las fuerzas de seguridad deben hacer todo lo posible para cortar las fuentes a quienes están detrás de ellas. Mi corazón está con las familias de las víctimas y deseo una rápida recuperación a los heridos. La comunidad drusa está pagando una vez más un alto precio por la defensa y la seguridad del Estado", cerró.