Israel se encuentra en las etapas finales de negociación para adquirir una vacuna contra el coronavirus, que está en una avanzada instancia de desarrollo, de una compañía de biotecnología estadounidense, confirmaron el domingo funcionarios del Ministerio de Salud.
Moderna anunció que pronto comenzaría la tercera etapa de experimentación. La compañía afirmó que podría comenzar la producción en masa de la vacuna el próximo septiembre.
En la fase uno la vacuna fue suministrada a 45 voluntarios, y demostró ser segura y sus efectos fueron prometedores. La fase dos, ya casi completa, consistió en evaluar la seguridad y eficacia de la vacuna. Si bien los datos no se hicieron públicos, se cree que quienes fueron vacunados desarrollaron una gran cantidad de anticuerpos, superando a aquellos que padecieron el virus y se recuperaron.
La vacuna de Moderna llamada mRNA-1373 contrarresta la capacidad del COVID-19 para ingresar a las células al evitar la producción de la proteína espiga que es la que permite al virus adherirse a la célula, evitando así que la enfermedad se desarrolle.
Si la tercera fase de prueba es exitosa, la compañía cree que podría comenzar la producción en masa de una vacuna en diciembre con un estimado de mil millones de dosis completas a mediados de 2021.
Otras compañías farmacéuticas que trabajan en el desarrollo de la vacuna son: CanSino (China) en fase similar a Moderna, pero cuyo primer beneficiario sería la población del país asiático; AstraZeneca (británico-suiza) que trabaja en cooperación con la Universidad de Oxford y cuyo primer receptor sería el público británico; Pfizer y Johnson & Johnson (Estados Unidos) ambas con planes para un desarrollo en masa de la vacuna una vez que esté disponible.