La nueva variante del COVID-19, denominada Ómicron y considerada "de preocupación" por la Organización Mundial de la Salud, fue detectada en dos médicos israelíes. Uno de los profesionales regresó recientemente de una conferencia en Londres, Reino Unido, y habría contagiado a su colega.
Los trabajadores de salud en cuestión trabajan en el centro médico Sheba, cerca de Tel Aviv. Ambos cuentan con tres dosis contra el coronavirus de la vacuna Pfizer y, hasta el momento, han mostrado síntomas leves.
Las autoridades del hospital creen que uno de los profesionales se contagio del virus en Inglaterra y, al regresar al trabajo, infectó a su compañero. Ambos se suman a los dos casos de Ómicron previamente detectados en Israel desde la irrupción de esta nueva mutación.
Este martes, desde el Ministerio de Salud de Israel confirmaron que la nueva cepa es más contagiosa que las anteriores, ya que cuenta con más de 30 mutaciones en su conformación. Sin embargo, todavía se aguardan los estudios que arrojarán si las vacunas aplicadas hasta el momento siguen siendo efectivas.
Como medida preventiva, Israel mantendrá cerradas sus fronteras a los extranjeros de todos los países durante 14 días. Además, las autoridades han reintroducido la tecnología de rastreo telefónico antiterrorista para detectar los contactos de un puñado de personas que probablemente hayan sido infectadas.